Los acuerdos del Gobierno autorizan la aprobación de dos protocolos relativos a la prohibición o restricción de este tipo de armas.

El primero de los protocolos restringe el empleo de minas, armas y otros artefactos, de las minas antipersonal que no sean lanadas a distancia y de las minas que sí lo son.

Asimismo, regula la creación de un registro para utilización de información sobre campos de minas, zonas minadas, armas trampa y otros artefactos. Por último prohíbe el empleo de toda mina antipersonal que no sea detectable.

Respecto al segundo protocolo sobre armas láser, establece la prohibición de emplear aquellas específicamente diseñadas para causar ceguera permanente. No se incluye el supuesto de que la ceguera fortuita pueda producirse por el mpleo legítimo, con fines militares, de sistemas láser.