Así lo indicó Plaja en rueda de prensa tras la reunión del Consejo Ejecutivo del Gobierno catalán, tras la decisión del Tribunal Constitucional (TC) de paralizar la tramitación de la reforma que pretende desbloquear la renovación del tribunal de garantías con los seis votos del bloque conservador, que tiene la mayoría, frente a los cinco de los progresistas.

Plaja avisó de que la “desacomplejada politización de la Justicia” por parte “de la derecha española” lleva al Estado “de nuevo” a una “peligrosísima espiral antidemocrática impropia de cualquier Estado” que se considere “garante” de una democracia plena. “Lo que está pasando es una vulneración plena de la democracia y las instituciones”, añadió.

A su vez, criticó que la Justicia utilizó Cataluña como “banco de pruebas” y los catalanes ya avisaron en su momento de que “solo sería el principio”, pero que “no nos creyeron” y ahora “se escandalizan”, pero “esta película” ya se vivió en esta comunidad. “Primero fue Cataluña”, continuó, y “como nadie se levantó”, los magistrados “hoy se sienten fuertes”.

En concreto, Plaja destacó que los catalanes instaron a los miembros del Gobierno a que fueran “valientes” al enfrentarse a las instituciones judiciales “secuestradas por la derecha extrema” que mantienen “unas mayorías caducadas para luchar contra la política desde la Justicia”.

Preguntada sobre si con estas declaraciones quiere decir que el Ejecutivo debe desobedecer la sentencia, Plaja aclaró que “ellos sabrán lo que tienen que hacer, que hagan lo que tengan que hacer para combatir este tipo de prácticas en el Estado” y que “no miren para otro lado como hicieron cuando el problema creían que se limitaba explícitamente a Cataluña”.

Según la portavoz del Govern, hay una “necesidad imperiosa” de renovar los órganos judiciales, desde el TC hasta el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y deploró que “unos señores que dicen que no quieren irse y no se van” le digan a la mayoría parlamentaria “tú mandas, pero nosotros más que tú”.