Medio ambiente

Greenpeace denuncia que ‘no hay agua para tanto regadío’ en una pancarta de 200 metros en un acueducto del Tajo-Segura

Madrid Cuenca
SERVIMEDIA

Alrededor de 25 activistas de Greenpeace desplegaron este jueves -primer día completo del verano astronómico- una pancarta de más de 200 metros de longitud en el acueducto del Cigüela (Cuenca), que forma parte del trasvase Tajo-Segura en la que podía leerse ‘No hay agua para tanto regadío’.

Junto a ella, asentada sobre el propio acueducto, varios de los activistas desplegaron con escaladoras desplegaron otra pancarta de 35 x 18 metros con el lema ‘Salvar el agua’.

Con ello, la organización quiso denunciar que España tiene “mucha infraestructura hidráulica, pero no garantiza una distribución equitativa del agua”, puesto que la actual política hidráulica permite “beneficios económicos cortoplacistas, cada vez en menos manos, a costa de un grave impacto ambiental”.

Greenpeace eligió el acueducto del Cigüela como un ejemplo de “infraestructura hidráulica faraónica” (mide 6,2 kilómetros) a las que “tanta prioridad se les ha dado en la gestión del agua en España y que todavía se siguen reclamando por parte de algunos partidos y lobbies”.

El trasvase Tajo-Segura, que circula por este acueducto, está “sobredimensionando” regadíos del área levantina y “acabando con una joya de la biodiversidad como es el Mar Menor”, según Greenpeace.

“Obras como ésta no son prioritarias para la gestión eficiente del agua y dejan de lado el verdadero problema, jugando con falsas promesas para obtener un puñado de votos, en contra de la protección real del medio hídrico (ríos, humedales, marjales, marismas, acuíferos…)”, añadió.

La organización afirmó que “se está poniendo en riesgo la supervivencia de la agricultura tradicional y familiar para ponerla en manos de grandes agroindustrias y fondos de inversión, y se están perjudicando enclaves fundamentales por su biodiversidad, como Doñana o las Tablas de Daimiel”.

‘BURBUJA’

Recientemente, Greenpeace presentó el informe ‘La burbuja del regadío', que señala que un 16,23% de los regadíos en España están en áreas tensionadas, es decir, con acuíferos en mal estado cuantitativo y cualitativo, y en zonas vulnerables a nitratos, y un 13,8% se encuentra en lugares que afectan a espacios naturales protegidos.

“Nuestros responsables políticos siguen prometiendo agua, un agua que no existe y que en el futuro será aún más escasa. Tenemos que cambiar la manera de gestionarla y apostar por una transición hídrica justa”, apuntó Julio Barea, responsable de Agua en Greenpeace España, desde el acueducto del Cigüela.

Barea añadió al respecto: “Nos jugamos poder tener agua para beber, que nuestra agricultura tenga futuro y que podamos mantener nuestra biodiversidad frente a las consecuencias del cambio climático. Las próximas sequías serán aún más intensas y prolongadas por lo que prometer ampliar regadíos es una mentira que pagaremos toda la sociedad y nuestro medio ambiente”.

Además de sensibilizar a la ciudadanía con la acción de este jueves, Greenpeace recorre estos días fuentes y baños públicos de más de 35 ciudades de toda España para alertar a la población sobre “el peligro del regadío intensivo, que se lleva casi el 80% del agua” del país.

(SERVIMEDIA)
22 Jun 2023
MGR/gja