Las dos funcionarias, que comparecieron como testigos, señalaron que Gorostiza habló en todo momento con normalidad y sin alterarse.

Por su parte, el letrado, que declaró como imputado ante García-Castellón, se ratificó en el contenido de las cartas remitidas la pasada semana a la Audiencia Nacional, en las que manifestaba que en ningún momento tuvo intención de amenazar a nadie.

Asimismo, explicó que cuando se dirigió al juez Moreno, diciéndole que después e la privación del derecho a la libertad está la privación del derecho a la vida, se refería a que ambos derechos son los principales que contempla la Constitución y que así se lo hizo ver al juez porque acababa de decretar la prisión para dos de sus clientes.

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