Así se expresó Hereu en una comparecencia en la Comisión de Industria y Turismo de la Cámara Baja para presentar las líneas maestras de su ministerio para la legislatura.

Sobre los factores que crean esta “ocasión única” se refirió a la aportación de los fondos europeos que permitirán inyectar en la economía española 160.000 millones de euros entre subvenciones y préstamos hasta 2026.

“Tenemos que transformar la economía para que sea más sostenible, digital y resiliente”, afirmó el titular de Industria, quien destacó que las políticas industriales recibieron más de 8.500 millones en 2023, cuatro veces más que en 2018.

En esta línea, defendió que la reindustrialización debe ser “un objetivo prioritario para el futuro de España para que el país esté mejor preparado para afrontar los cambios de ciclo económico y pueda contar con empleo cualificado y de más calidad que es el que genera la industria”.

Además, señaló que permite “un crecimiento sostenible, sostenido y más inclusivo” por lo que lamentó que hoy en día represente alrededor de un 15% del PIB, cinco puntos menos que en la media de la eurozona.

Otros factores que según el ministro puede aprovechar España para incrementar su peso industrial son contar con “la energía más barata de las cuatro grandes economías de la zona euro” y el “cambio de paradigma con el concepto de la autonomía estratégica abierta en Europa”.

A este respecto, indicó que el actual escenario geopolítico lleva a muchas empresas a acercar la producción a los mercados finales y a acortar las cadenas de suministro recortando el riesgo. “están volviendo a traer producción a Europa”, apostilló.

Por ello, señaló que “los Perte van a continuar siendo el principal motor de transformación” y que los vinculados a su Ministerio aportarán más de 8.000 millones en créditos y subvenciones hasta 2026 movilizando una inversión total de más de 24.000 millones y creando 10.000 puestos de trabajo. “Lo mejor está por venir”, sentenció.

Por último, confirmó que su departamento va a actualizar el marco normativo con la nueva ley de industria, que, entre otras medidas, reducirá las cargas administrativas y creará los nuevos instrumentos de política industrial, los proyectos de interés estratégico estatal.

También adelantó que contará con un nuevo mecanismo de gestión de los procesos de reindustrialización ante cierres industriales que permitan asegurar las capacidades de producción y el empleo y con un sistema para asegurar el suministro de recursos de primera necesidad con carácter estratégico como alimentos, medicinas o materias primas.