En declaraciones a Servimedia, fuentes de Iberia denunciaron sin embargo que se ha magnificado la repercusión del anuncio de su presidente, Fernando Conte, de que la compañía iba a eliminar algunas rutas desde El Prat y desvinculó esta operación con la puesta en marcha en otoño de la línea de bajo coste participada por Iberia.

Asimismo, estas fuentes anunciaron que Iberia no quiere retirarse de Barcelona y que este proceso de abandono de rutas no rentables se está desarrollando también en otros aeropuertos.

Iberia defendió la legitimidad de este proceso en la adaptación a la demanda y en la búsqueda de la rentabilidad para sus accionistas y trabajadores y denunció que se "está sacando de contexto" cuando es algo que se lleva haciendo desde hace un tiempo y no ha pasado nada.

Por otro lado, aseguró también que el anuncio de Conte se relacionó sin fundamento con la creación de la aerolínea de bajo coste y remarcó que esta nueva compañía no va a ser gestionada por Iberia.

Según estas fuentes, Iberia tiene todo el derecho a invertir en este negocio porque el mercado demuestra que las aerolíneas de bajo coste son exitosas.