Dichos expedientes, que según informó la aerolínea en un comunicado han empezado a ser remitidos a sus destinatarios hoy mismo, son los primeros de los 41 que hay abiertos y que siguen investigándose, por si de su instrucción pudieran derivarse comportamientos ilegales.

Los diez expedientes tramitados contemplan diversas actuaciones irregulares tendentes a retrasar la salida de los vuelos, con el consiguiente trastorno a los clientes y efecto multiplicador sobre vuelos sucesivos en la operación diaria, que en su conjunto han supuesto retrasos, pérdidas de conexión, cancelaciones y costes millonarios a la compañía, afirma ésta.

De hecho, la aerolínea calcula que dichos costes superan los cinco millones de euros, destinados a atender a los pasajeros afectados por los retrasos, cancelaciones y pérdidas de conexiones.

Iberia entiende que el negligente comportamiento de los diez pilotos expedientados está relacionado con una huelga de celo que mantiene parte del colectivo de pilotos y que corresponde a un actuación concertada de los mismos, organizada, inspirada o promovida por el sindicato Sepla en el marco de la conflictividad derivada de los problemas que están surgiendo en la negociación del convenio colectivo.

Los encausados tendrán desde el momento de la recepción del pliego de cargos cinco días naturales para presentar alegaciones y a partir de ahí la compañía, en su caso, establecerá las sanciones que haya lugar.

La dirección de la compañía y los representantes sindicales de los pilotos tienen previsto volver a reunirse mañana para continuar la negociación del convenio.

Desde que arrancara esta presunta huelga de celo a principios de diciembre, Iberia ha tenido que cancelar más de 600 vuelos y ha sufrido retrasos en más de 6.000.