Cáncer

Identifican que el primer oncogén descubierto hace 40 años tiene una acción desconocida

MADRID
SERVIMEDIA

Científicos del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) han identificado que el primer oncogén descubierto hace más de 40 años tiene un mecanismo de acción desconocido hasta ahora, ya que es capaz de autoactivarse, lo que abrirá la puerta al desarrollo de nuevos fármacos.

Según informó este martes el centro de investigación, en las últimas décadas se desarrolló la terapia dirigida con el uso de los primeros fármacos que actúan específicamente contra dianas (causas) moleculares del cáncer, lo que aumenta su eficacia y reduce los efectos secundarios.

Muchos de ellos son fármacos que inhiben la acción de enzimas llamadas tirosina-quinasas, y han supuesto un avance significativo en el tratamiento dirigido contra varios tipos de cáncer.

Ahora, el grupo del investigador Iván Plaza-Menacho, jefe del Grupo de Quinasas, Fosforilación de Proteínas y Cáncer del CNIO, ha descubierto un nuevo mecanismo de activación para la primera tirosina-quinasa conocida, que es también el primer oncogén.

“Hemos descubierto un nuevo paradigma en el mecanismo de acción del primer oncogén identificado, c-Src, con importantes implicaciones en el descubrimiento de fármacos de nueva generación”, explicó el científico.

ONCOGÉN SOBREACTIVADO

Según este estudio, publicado en la revista ‘Nature Communications’, la relación entre el cáncer y c-Src se descubrió molecularmente a finales de los años 70, pero pese al tiempo transcurrido aún no se entiende del todo, y se sigue investigando.

El oncogén c-Src aparece sobreactivado en aproximadamente el 50% de tumores de colon, hígado, pulmón, mama, próstata y páncreas. Lo que desvela el nuevo trabajo es un nuevo mecanismo, inesperado, por el que c-Src puede activarse a sí mismo de forma autónoma mediante la autofosforilación (el proceso por el cual una proteína se fosforila así misma) y provocar cáncer.

Existen inhibidores dirigidos contra la actividad de c-Src con aplicaciones terapéuticas. Por ejemplo, ‘dasatinib’ fue aprobado para el tratamiento de pacientes con leucemia mieloide múltiple y leucemia linfocítica aguda. Actualmente hay en curso ensayos clínicos con pacientes con cáncer de mama metastático, de colon y próstata con inhibidores que actúan sobre la actividad de c-Src.

Por ello, los nuevos resultados obtenidos por el grupo del CNIO “tienen implicaciones importantes en el diseño y búsqueda de fármacos de nueva generación que bloqueen de una manera más específica la función de este oncogén”, señaló Iván Plaza-Menacho.

(SERVIMEDIA)
31 Oct 2023
ABG/clc