Ubicado en una de las zonas más desfavorecidas de Zaragoza, este centro acoge alumnado de 36 nacionalidades y trabaja para ofrecer una educación de calidad promoviendo la igualdad, la equidad y la innovación. Por ello se ha convertido, según el jurado del Premio Escuela del Año, en "un referente en la transformación, y una influencia en su entorno, construyendo y contribuyendo en sus necesidades".

El jurado también reconoció la labor de la comunidad educativa que ha sabido fusionar el campo de las humanidades, la ciencia y la tecnología a través de una alta diversidad de propuestas lideradas "por un personal docente que ha encontrado en la interdisciplinariedad y el trabajo entre etapas una fórmula de alto impacto y resultados académicos. Una apuesta por un modelo de trabajo colaborativo donde el centro inspira una comunidad de aprendizaje docente". El jurado destacó, además, la apuesta por "un marco de convivencia que encuentra en la diversidad cultural, una oportunidad".

Según subrayó la fundación en un comunicado, el premio tiene el objetivo de difundir la tarea de los centros galardonados y fomentar su visibilidad para contribuir a convertirlos en referentes de la educación innovadora.

Se trata de la cuarta edición de este galardón que reconoce a centros escolares comprometidos con el desarrollo del talento y la innovación educativa.