En declaraciones a Servimedia, Igea confirmó haber recibido el expediente, pero no lo va a leer porque esto “no se corresponde con un mínimo estándar de un partido democrático”. Lo que hará es esperar “la sanción” y ya aseguró que no iba a recurrir ni entrar en ningún proceso porque si lo hace se podría pensar que hay algo y “no hay nada”.

Según Igea, estos expedientes responden a la intención de la dirección nacional de Ciudadanos de “silenciar” a las “voces críticas” y eso quiere decir que “tú eres incapaz de debatir con nosotros”. “Si tuvieras razones, argumentos, irías a un consejo, debatirías, y te arriesgarías a ganar o perder, que es como se hacen las cosas en un partido liberal de verdad”, aseveró.

“Después de un batacazo electoral tu solución no es asumir tu responsabilidad, sino intentar trasladársela a quienes han dicho que las cosas no se hacían así. Yo no lo he visto nunca, ni con Albert ni con Inés, y mira que las tuve. Nunca jamás en este partido he vivido las cosas que estoy viviendo”, explicó Igea.

Sobre el expediente, apuntó que le “consta” que esto no tiene su origen en las críticas a la dirección nacional por decidir no concurrir a las elecciones del próximo 23 de julio, sino que es una decisión “tomada desde febrero”, porque así se lo comunicó “el propio coordinador del partido”. “No es una cosa que yo no supiera que iba a suceder”, añadió.

“MEDIOCRES”

Asimismo, Igea comentó que lo que debería estar haciendo un “partido liberal” como Ciudadanos es denunciar la entrada “del populismo de derechas en las instituciones”, refiriéndose a la entrada de Vox en distintos parlamentos, y “enfrentándose a quienes niegan derechos y libertades, y no intentando matar a las voces críticas de tu partido”.

Para Igea, el problema de esta dirección, liderada por Adrián Vázquez y Patricia Guasp, es que está “en manos de personas muy mediocres” y que son “bastante miedosos”. Además, subrayó que, especialmente las últimas decisiones que se han tomado están “beneficiando” al Partido Popular de una manera “absolutamente descarada”.

No solo la decisión de no presentarse al 23-J, sino la de “no confrontar la entrada del populismo” en la Comunidad Valenciana, por ejemplo. En este sentido, Igea deploró que Vázquez “no ha dicho nada al respecto”, sino que está en “Silicon Valley haciendo unas cosas chulísimas”.

En este sentido, puntualizó que “lo más triste de todo esto” es que un partido que tuvo una Ejecutiva con gente como Luis Garicano, Juan Carlos Girauta o Toni Roldán, entre otros, ahora “es un club mediocre” y “asustadizo” que “no está a la altura de lo que nuestros votantes necesitan”.

CONSEJO GENERAL

Esta decisión de Ciudadanos implica la suspensión de sus derechos de representación, por tanto, no podrán formar parte del Consejo General de esta formación, que este viernes realiza su reunión ordinaria. Sobre la última, que fue telemática, Igea denunció que se silenciaron los micrófonos “para que nadie hablase”.

Afiliados del partido realizaron un comunicado en el que denuncian que, tras las sanciones contra un número indeterminado de afiliados, hoy la Comisión de Régimen Disciplinario, en lugar de reaccionar ante esta “injerencia en la separación de poderes orgánicos, agrava la imagen de parcialidad ejecutando con celeridad las sanciones deseadas” por la dirección.

Explican que en los expedientes contra consejeros se ha decidido la aplicación inmediata como medida cautelar de la pérdida de cargos orgánicos, que además de “injusta” en su intención es “totalmente desproporcionada” puesto que está prevista para apoyos a otras formaciones o actuar contra la línea ideológica del partido, pero no por “cuestionar” a la dirección.

Por todo ello, estos afiliados consideran que la razón por la que la Ejecutiva ha solicitado y la Comisión Disciplinaria no ha dudado en imponer esta cautelar “es clara”: “impedir a varios consejeros utilizar sus voces y sus votos el próximo 30 de junio”, en la reunión del Consejo General en la que iban a participar Bal e Igea.