"El hecho deque las acreditaciones masivas se concedieran por el FMI y no por el ministerio complica extraordinariamente las condiciones de seguridad. El Fondo se encargó de hacer los pases en contra de las recomendaciones explícitas del ministerio", afirmó.

Una vez concedidas, "es difícil", aseguró Belloch, "verificar con éxito operaciones de impermeabilización o de seguridad. Para impedir actos de este tipo o se controla la concesión de acreditaciones, que es lo correcto, o se toman medidas tan excesivas para cntrolar el acceso que lo convertirían en inviable. No podíamos cachear a las casi cinco mil personas acreditadas".

Belloch anunció que ha abierto una "investigación exahustiva" para detectar los fallos existentes y determinar responsabilidades. Cuando este informe esté concluido, el ministro informará de su resultado "al Parlamento y a la opinión pública" por lo que aclaró que sus apreciaciones del momento son sólo "aproximaciones poco sólidas".

El ministro insistió en que no se delimitarán reponabilidades sobre el caso en tanto no esté finalizada la investigación que su departamento ha puesto en marcha.

A su juicio, el incidente ocurrido el martes no revela una "menor diligencia" de las fuerzas de seguridad, sino algunos errores que "deben servirnos para aprender la lección".