El contrato, cuyo plazo de ejecución es de ocho meses, incluye la revisión y el sostenimiento de misiles, torpedos y equipos que albergan estas instalaciones, con el objetivo de asegurar su disponibilidad operativa y un funcionamiento fiable.

El listado de equipos, material y armas a mantener, recogido en el pliego de prescripciones técnicas, incluye los misiles Standard SM-1 block V, VIA, VIB de las fragatas F80; los misiles Standard SM-2 block IIIA y ESSM RIM-162 de las fragatas F100; y los torpedos MK-46 Mod5A, utilizados tanto por las F80 como por las F100. Indra también llevará a cabo la revisión y puesta a punto de contenedores, 'canisters' y equipamiento auxiliar y de mantenimiento.

En todo caso, la Armada puntualiza que a lo largo del contrato puede haber modificaciones en este listado debido a la entrada en servicio de nuevo material o la baja de alguno de los sistemas mencionados. Estos cambios, añade, serán acordados con el contratista.

El taller de misiles y torpedos de la Armada en Mougá está situado al noroeste de la ciudad de Ferrol. Las instalaciones, con un perímetro de cinco kilómetros, cuentan con una nave industrial y una serie de polvorines subterráneos que albergan el armamento de las fragatas F-110, las más modernas de la Armada, con base en el cercano Arsenal de Ferrol.

Este centro, en el que trabaja un equipo de 30 militares de la Armada, efectúa el mantenimiento y certificación de los torpedos y misiles en servicio y participa en la instalación en los barcos de este armamento. Está dividido en dos áreas (misiles y torpedos), y cuenta con un complejo sistema que permite comprobar mediante la simulación que todos los componentes del misil funcionan de forma adecuada.

El contrato forma parte de un acuerdo marco entre la Armada e Indra suscrito a finales de 2020 valorado en casi cuatro millones de euros, incluyendo importe inicial, modificaciones previstas y una posible prórroga.