En una nota informativa difundida este lunes, desde ING explican que antes del ‘Día de la Liberación’, en el que Donald Trump anunció el listado de aranceles y países que iba a imponer Estados Unidos, se esperaba una pausa en las bajadas de los tipos de interés.

Pero los aranceles a la Unión Europea anunciados por Trump “han traído de vuelta las preocupaciones sobre el crecimiento de la eurozona”, según ING. A la fortaleza del euro y la caída en los precios de la energía, que generaban desinflación, se han añadido las tensiones comerciales. Como resultado, el BCE “continuará” su actual ciclo de relajación de la política monetaria esta semana.

Según estos analistas, la bajada esperada esta semana podría calificarse de “recorte de seguridad”, que sería inocuo y que, de mantenerse, no solo podría en duda la voluntad del BCE de impulsar el crecimiento, sino también que podría fortalecer más el euro. Destaca que el tipo de cambio del euro ponderado por el comercio exterior se encuentra en el nivel más elevado desde la creación de la unión monetaria.

Según ING, el BCE se enfrenta a futuro a dos retos. Por un lado, las tensiones comerciales persistentes y un nivel “elevado” de incertidumbre “podría forzar” al BCE a recortar los tipos más allá de lo que admitiría actualmente. Al mismo tiempo, la fortaleza del euro “aumentará la presión desinflacionaria” sobre la eurozona. Podría impulsar al banco comunitario a abrir, al menos, verbalmente, la puerta a una política monetaria acomodaticia o expansiva.