Seguros

Los ingresos por primas de las aseguradoras crecieron un 5% en 2021 aunque aún no recuperaron niveles precrisis

MADRID
SERVIMEDIA

Los ingresos de las aseguradoras por primas a cierre de 2021 se situaron en 61.835 millones de euros, un 5% más que un año atrás, pero un 3,65% por debajo del registro de 2019, ejercicio previo a la pandemia.

Así lo dieron a conocer la patronal de las aseguradoras Unespa e Investigación Cooperativa de Entidades Aseguradoras (ICEA) en una rueda de prensa para presentar las principales magnitudes del sector asegurador en 2021.

De los ingresos logrados a lo largo de 2021, 38.277 millones de euros correspondieron al ramo de no vida y los 23.558 millones restantes al de vida, según muestran los datos provisionales recabados por ICEA. Los ramos ligados a la actividad empresarial, así como salud y multirriesgo, son los que muestran un mayor dinamismo.

La facturación del negocio de vida, reflejada en los ingresos por primas, aumentó un 7,88% en términos interanuales. Si se compara con los datos de 2019, en cambio, muestra una caída del 14,41%. El volumen del ahorro gestionado a través de seguros aumentó levemente de un año para otro y las provisiones técnicas se situaron en 195.707 millones al acabar el pasado diciembre, un 0,82% más.

Por su parte, la facturación del ramo de no vida cerró 2021 en positivo, con un repunte del 3,3% en comparación con diciembre de 2020 y del 4,43% frente a diciembre de 2019.

Dentro de esta categoría, los seguros diversos, que agrupa las protecciones ligadas a la actividad empresarial, aportaron 9.320 millones en el año, con un aumento del 5,57% en el último año y “es fiel reflejo de la gradual recuperación económica”. También destaca la evolución de los seguros de salud, que crecieron un 4,93% y sumaron 9.849 millones.

Las pólizas que protegen inmuebles repuntaron otro 4,7% en variación interanual, hasta los 8.117 millones, y los seguros del automóvil, que fueron los que más aportaron al ramo de no vida, registraron un comportamiento distinto, al cerrar 2021 con unos ingresos de 10.990 millones, un 0,87% menos que en 2020 y un 2,85% menos que en 2019.

La presidenta de Unespa, Pilar González de Frutos, valoró, a tenor de los datos avanzados, que 2021 es un ejercicio en el que “hemos vuelto a los números negros evolutivos, pero esa realidad no nos puede escamotear el hecho de que obtener incrementos en un año como este es algo prácticamente cierto, teniendo en cuenta las muy malas cifras que se vieron en 2020 a causa de la pandemia y el confinamiento. el sector asegurador, más allá de esa realidad cuantitativa, se está enfrentando a retos muy importantes que pueden condicionar su evolución presente y futura”.

González de Frutos destacó que la situación actual que combina tipos de interés bajos con inflación elevada “es la peor de las posibles para el ahorro finalista a largo plazo”.

A ello se suma que “la nueva política del ahorro por la que ahora se ha decidido apostar” se basa en la “retirada del beneficio fiscal al ahorro individual”, lo que “tapona el ahorro individual” mientras se pretende impulsar el ahorro colectivo con la creación de un fondo de promoción pública y ello se traduce en “un descenso significativo y presente del ahorro individual que no se corresponde con un incremento del ahorro colectivo, porque éste está por llegar”.

González de Frutos lamentó que el nuevo pilar de ahorro colectivo no se va a concretar “rápido” porque se necesita “mucho diálogo” entre el Gobierno, las patronales, los sindicatos y los gestores del ahorro.

Entre otros retos a los que se enfrenta el sector asegurador, citó la adaptación a las nuevas normas de información financiera, las consecuencias de la revisión de solvencia II, la regulación de numerosos aspectos de la digitalización, el reforzamiento de la normativa de protección del consumidor, de la creación de la autoridad de protección del cliente financiero y de la incipiente normativa en materia de sostenibilidad en el ámbito financiero.

(SERVIMEDIA)
18 Ene 2022
MMR/mjg