Según el IPF, la medida apuntada por Trujillo es "regresiva y esperpéntica", porque impediría a las familias disponer de una vivienda digna, ya que los hogares necesitan propuestas encaminadas a reducir el precio de la vivienda, y no el tamaño de las mismas.

Además, indica que se trata una medida rechazada desde prácticamente todos los estamentos, ya sean sindicatos, instituciones familiares y expertos. Incluso hasta su propio partido político, el PSOE, apoyó ayer en el Congreso de los Diputados una moción que pedía al Gobierno que no modifique la legislación para permitir la construcción de pisos de 30 metros cuadrados.

El IPF pide también la dimisión de Trujillo por entender que su actuación personal dentro de su ministerio "va en contra" del Código de Buen Gobierno aprobado por el Ejecutivo, que, entre otras cosas, afirma: "Por un lado, hay que abstenerse, en el desempeño de un puesto público, de manifestaciones externas inapropiadas, al objeto de evitar toda actuación ostentosa que pueda menoscabar la dignidad con que ha de ejercerse el cargo público. Y por otro lado, imponiendo la austeridad en el uso de los recursos que la Administración General del Estado pone a disposición de los mismos".