El diputado de IU Francisco Frutos preguntó al Gobierno por el coste de esta operación para los ciudadanos españoles. Según la respuesta, el coste del saneamiento de la entidad que presdía Mario Conde ascendió a 192.542 millones de pesetas.

De este importe, la mitad fue abonado por el Banco de España y la otra mitad por el Fondo de Garantía de Depósitos de Establecimientos Bancarios (FGDEB), donde todos los bancos hacen sus aportaciones para casos de insolvencias.

A pesar del elevado importe de gasto que supuso la intervención, el Gobierno asegura que es "considerablemente inferior al que se pensaba al inicio del proceso", ya que el quebranto patrimonial al que hacía frente Bansto ascendía a 605.000 millones de pesetas.