La desarticulación de esta red fue posible gracias a la colaboración internacional con las autoridades policiales y judiciales de Marruecos, las cuales detectaron la posible existencia de organizaciones criminales que pretendían trasladar grandes cantidades de hachís a la Península con destino a otras zonas de Europa

El estupefaciente estaba oculto en dobles fondos de la parte trasera de camiones tras cajas de pimientos verdes para pasar desapercibido en cualquier control policial o aduanero. Unos vehículos estos que fueron interceptados en Cádiz y en Granada, donde se disponían a extraer la droga para su distribución.

Tal y como explicó la Policía Nacional, la investigación, dirigida por la Fiscalía Especial Antidroga de Algeciras, se inició contando con la colaboración internacional del fiscal general de la Corte de Apelación de Tánger y de la Dirección General de Seguridad Nacional de Marruecos (DGSN).

En concreto, avanzadas las primeras pesquisas, detectaron uno de los camiones tras su llegada al puerto de Algeciras, estableciendo rápidamente un dispositivo policial que culminó el pasado 21 de octubre, al interceptarlo cuando se disponían a descargar la droga en una finca de la localidad de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz).

Durante todo el recorrido, otros miembros de la organización realizaron labores de contravigilancia a bordo de otros turismos para alertar de cualquier presencia policial y así asegurar el transporte.

Durante el registro, los agentes comprobaron que en el interior del remolque había numerosas cajas de pimientos verdes ocultando un doble fondo donde se encontraban los fardos con 12 toneladas de hachís.

Por ello, se procedió a la detención de 15 personas, las cuales ingresaron en prisión tras pasar a disposición judicial como presuntas responsables de los delitos de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal.

SEGUNDA OPERACIÓN

Tres días después, detectaron otro vehículo que embarcó también en Tánger con destino a Algeciras. Este llegó a una nave industrial de una localidad del norte de la ciudad de Granada tras haber realizado el trayecto con numerosas medidas de seguridad para asegurar el estupefaciente, utilizando para ello vehículos lanzadera que alertaban en caso de detectar la presencia policial.

De nuevo, los investigadores descubrieron que, tras varias filas de cajas de pimientos verdes había una estructura cerrada con paneles de madera a modo de caleta, donde se ocultaban aproximadamente otras ocho toneladas de hachís. En este caso se detuvo a cinco personas, a las que se les imputaron los delitos de tráfico de drogas y pertenencia a organización criminal. Todas ellas, confirmó la Policía, ingresaron en prisión.

En esto dos operativos se intervinieron nueve vehículos (entre camiones, remolques, furgonetas y turismos), una pistola automática y más de 7.000 euros. Además, los agentes comprobaron que parte de la mercancía estaba ya preparada para su venta y distribución en pequeños paquetes con envoltorios de colores llamativos con el objetivo de atraer a un público joven.

La Policía Nacional destaca que estas operaciones contra el narcotráfico se suman a otras llevadas a cabo con éxito anteriormente fruto de la colaboración con las autoridades marroquíes, lo que "da testimonio de la excelencia de las relaciones de cooperación en materia de seguridad entre ambos países" .