En un mitin en Valencia ante unos 400 seguidores, Montero abrió su intervención, que cerraba el acto, con una referencia a la efeméride. Y añadió como interpretación propia que el rey Juan Carlos “abdicó porque estaba enterrado en corrupción” y “para que pareciese que el problema era él y no la monarquía”.

Montero preguntó “cómo puede representar al pueblo alguien que no ha sido elegido por el pueblo”, recordó que el segundo beneficiario de la cuenta de Juan Carlos en Suiza es el rey Felipe VI y afirmó que “la monarquía es una institución al servicio de la corrupción y las comisiones”. Terminó su diatriba contra la monarquía retando a la princesa de Asturias a presentarse a las elecciones y remató con un “¡viva la república!”, que fue respondido por el auditorio con la consigna “antes o después, república otra vez”.

Después de esta introducción, Montero retomó sus mensajes habituales de campaña, comenzando por el de que “la paz es la tarea política más urgente”, porque con las guerras hay recortes, inflación y daños al planeta. Así, preguntó si “habría tantas guerras y conflictos armados en el mundo si fuesen los hijos de los ricos quienes muriesen en esos conflictos” y “si fuesen los ricos, las grandes corporaciones, quienes pagan esas guerras y no quienes reciben beneficios multimillonarios cada vez que hay un conflicto armado”.

Entre los beneficiarios mencionó tanto a los bancos y grandes empresas españoles como a EEUU. “La guerra es un mecanismo para que los ricos sean más ricos y los pobres sean más pobres y sean los que mueren en el campo de batalla. Por eso nosotras defendemos la paz, porque solamente se pueden tener derechos si estás vivo o viva y si hay paz para construir esos derechos”, sentenció.

Colateralmente, criticó que la guerra de Ucrania está siendo la “excusa” para construir al frente de la UE una “gran coalición de la guerra” con la extrema derecha dentro. Esto le sirvió para denunciar que el PSOE se presente como cortafuegos frente a Vox y luego esté dispuesto a que su cabeza de lista, Teresa Ribera, sea comisaria europea aunque haya otros de ultraderecha.

"LA PASTA" Y GAZA

Montero también denunció el genocidio en Gaza y preguntó “qué ata a Pedro Sánchez, qué ata a este Gobierno con el genocida Netanyahu para no romper relaciones diplomáticas y para hacer todo lo humanamente posible para parar el genocidio”. “La pasta, la pasta, la pasta”, le respondió casi al unísono su auditorio.

Citando a la antropóloga Margaret Mead, la candidata de Podemos afirmó que “el primer signo de la civilización de la especie humana había sido un fémur fracturado y reparado”, como epítome de unos cuidados que ahora ella ve en riesgo, dado que gran parte del presupuesto europeo se irá a gasto militar.

Montero, como en otros actos de campaña, reclamó que no se permita a los fondos de inversión comprar viviendas ni tierras y también deploró el pacto migratorio de la UE, desde el principio de que “ningún ser humano es ilegal y las fronteras tienen que tener agua, comida caliente, mantas”, para mantener esos cuidados que son el primer signo de la civilización.

La exministra de Igualdad también reiteró su demanda, incluida en el programa electoral de Podemos para las europeas, de que “la libre determinación de la identidad de género no puede ser una recomendación, tiene que ser una obligación, y hay que prohibir las zonas de exclusión en toda Europa”. Y lo mismo hizo con sus propuestas de sendas empresas públicas energética y farmacéutica en toda la UE.