Sartorius, que presentóuna interpelación al Ejecutivo sobre los efectos de la posición española en las relaciones con los países árabes, afirmó que algunos gobiernos de esta región podrán entender la postura de España, "pero los gobiernos pasan. Lo que perduran son los sentimientos de los pueblos".

IU considera que el prestigio de nuestro país en los estados del norte de Africa está "bastante rebajado" y esto, según Sartorius, conllevará un "coste gravísimo" para la política exterior española.

El ministro de Defensa, Nrcís Serra, le respondió asegurando que "el mayor daño que un gobierno podría causar a la seguridad nacional de su país y a las relaciones con sus países vacinos" es aceptar el uso legítimo de la fuerza, que ha puesto en práctica por el régimen iraquí.

En su opinión, la actitud de IU de limitarse a condenar la intervención de Sadam Husein en Kuwait es una posición "inaceptable".

"Hay que luchar activamente y dar todo el apoyo posible a los países árabes que están implicados en la lucha contra Husin. No hacerlo, sí podría tener costes irreversibles para España", afirmó.

RESPETO AL CONVENIO BILATERAL

Por otra parte, el ministro para las Relaciones con las Cortes, Virgilio Zapatero, en ausencia del titular de Exteriores, respondió a una pregunta del PP sobre la opinión que merecen al Gobierno unas declaraciones del secretario de Estado para la Cooperación Internacional, Luis Yáñez, en las que señaló que España obtendría beneficios de la crisis a cambio de un coste prácticamente insignificante. Zapatero afirmó que la oposición ha sacado de contexto las manifestaciones de Luis Yáñez y que la única posición del Gobierno sobre la crisis del Golfo Pérsico es la que ha fijado reiteradamente el presidente González.

Javier Rupérez, portavoz del PP para asuntos de Defensa, calificó de "ligereza imperdonable" el hecho de que Yáñez considerara una "anécdota" el riesgo de la flotilla española desplegada en aguas del Pérsico.

De otro lado, Narcís Serra reiteró que el Gobierno tiene la garantíaabsoluta de que no se introducirá armamento nuclear en territorio español, porque, precisó, así lo recoge el artículo 11 del convenio bilateral hispano-norteamericano, que prohíbe expresamente este extremo.

"El hecho de que Estados Unidos introdujera armas nucleares o químicas en España supondría que este país desea violar el tratado bilateral", agregó, "y estamos convencidos de que esto no ocurrirá".