IU RECURRIRA CONTRA LA REPERCUSION DEL CAMBIO DE LOS GENERADORES DE VAPOR DE LAS NUCLEARES EN LA TARIFA ELECTRICA
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Izquierda Unia (IU) recurrirá ante los tribunales contra la repercusión del cambio de los generadores de vapor de las centrales nucleares de Ascó I y II y Almaraz I y II en la tarifa eléctrica.
Luis Miguel Sánchez, del Area Económica de IU, manifestó a Servimedia que son las propias centrales nucleares las que deberían asumir los costes derivados del cambio de los generadores de vapor, y no los usuarios.
Sánchez recordó que en Estados Unidos las compañías eléctricas propietarias de centrales nucleares equipads por la multinacional Westinghouse, al igual que Ascó y Almaraz, que han sufrido problemas similares por los defectos de diseño de los generadores de vapor han demandado a Westinghouse.
Según IU, en España Ascó y Almaraz no han actuado contra la multinacional al tener cubiertos los costes de la sustitución de los generadores a través de la tarifa.
Un estudio de Izquierda Unida señala que el cambio de los generadores de vapor defectuosos provocará un incremento de 0,08 pesetas por kilovatio.
Este análisis no coincide con el que han realizado las centrales nucleares, que aseguran que la sustitución de estos elementos provocará un importante ahorro energético a medio plazo.
Según José Méndez Villamil, portavoz de la central de Almaraz, los nuevos generadores permitirán incrementar considerablemente la eficiencia de las centrales, lo que a la larga repercutirá favorablemente en la tarifa eléctrica.
En el caso de Almaraz, los propietarios de la central alcanzaron diversos acuerdos con Wetinghouse que comprometen a la multinacional a la concesión de diversas contraprestaciones para compensar el perjuicio que han ocasionado los defectos de diseño de los generadores.
Hasta el momento, Ascó I es la única central que ya ha sustituido los tres generadores de vapor, ya que los cambió este mismo año. En 1996 se acometerá el cambio en Almaraz I, aprovechando la parada para la recarga de combustible, y durante los dos años siguientes se sustituirán en Ascó II y Almaraz II. El coste global de etas operaciones es de unos 70.000 millones de pesetas.
La operación de cambio de generadores de vapor también ha provocado las críticas de las organizaciones ecologistas, que además de la repercusión que tendrá en el sistema tarifario denuncian el alto riesgo de contaminación radiactiva que entraña la operación para los trabajadores que intervienen en ella.
Además, Carlos Bravo, portavoz de Greenpeace, destacó que en el caso de Almaraz será necesario romper el edificio de contención del reactor, a que los generadores de vapor, dadas sus dimensiones, no caben por la compuerta de equipos.
Según Bravo, la manipulación del edificio de contención podría dejar secuelas en el mismo y reducir la seguridad de la instalación nuclear en caso de accidente.
(SERVIMEDIA)
21 Nov 1995
GJA