"Pocas veces", añadió Jáuregui, "se han preocupado de otros linchamientos que se han producido, y desde luego mucho peores que los morales, como por ejemplo los muertos. No sería malo que empezarán a asustarse".

Respecto a las querellas presentadas contra varios dirigentes de HB, el dirigente socialista señaló que "sirven como medicina preventiva, ya que al menos a partir de ahora se tentarán la ropa, porque saben que a lo mejor les ocurre algo".

Para Jáuregui, el deito de apología del terrorismo requiere una mayor concreción, pero lo que se demanda ahora es que el poder judicial haga una interpretación más crítica y más intensa de esos comportamientos.

"Comportamientos", explicó el líder socialista vasco, "que para todo el mundo, para todo el cuerpo social, responden a unas actuaciones de connivencia estratégica y política con la banda terrorista ETA que deben ser castigadas".

NO A LA NEGOCIACION

Por otra parte, el portavoz del Sindicato Unificado de Poliía (SUP), José Manuel Sánchez, manifestado a Onda Cero que su sindicato ha pedido al Gobierno que no haya ningún tipo de negociación con la banda terrorista ETA.

Sánchez, que aunque cree que "en la administración de justicia hay altas dosis de miedo", apoya la actuación del juez Carlos Bueren.

El portavoz del SUP criticó que los jueces no hayan actuado hasta que el Gobierno no ha dado instrucciones al respecto, y agregó que "si los muertos por ETA en lugar de tener una placa de policía llevaran l balanza de justicia, el tratamiento sería distinto".

Preguntado si daría escolta a Iñigo Iruin, el portavoz del SUP fue tajante: "En mi trabajo me lo pueden pedir, está legitimado que se le facilite la seguridad, pero yo personalmente no se la daría. Pediría la excedencia".