Es la primera vez que la magistrada se pronuncia sobre las quejas presentadas ante el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) por las defensas la exconsejera Salomé Pradas y del exsecretario de Emergencias Emilio Argueso, que están investigados en la causa.

En su auto, la jueza recuerda que la “independencia e inamovilidad” de los jueces y magistrados es “uno de los fundamentos del Estado de Derecho” y advierte de que “los jueces no se eligen por las partes”.

La instructora explica que en sucesivas informaciones periodísticas le han "denigrado como juez y como mujer". "Dichos artículos albergan, en el apartado destinado a comentarios, un discurso de odio que incluye insultos y amenazas hacia esta Juez de Instrucción y hacia mi marido”, dijo.

En este sentido, asegura que las quejas se han presentado de acuerdo con meras “informaciones periodísticas insultantes” hacia ella y su marido y destaca que sus resoluciones en esta causa han sido “confirmadas por la Audiencia Provincial de Valencia”.

Finalmente, la jueza denuncia que las imágenes difundidas en medios conservadores de ella con su marido y su hija menor de edad fueron grabadas “subrepticiamente” por uno de los letrados personados en la causa que no pagó la cámara del sistema Webex al acabar una de las declaraciones.