El coche registró una pequeña explosión sin que se sepan las causas de la misma. Su propietaria lo abandonó y, debido a que estaba aparcado en una ligera pendiente, el vehículo alcanzóa otros dos turismos, que también ardieron.

La noticia de este suceso, que según las fuentes consultadas no tiene ninguna connotación terrorista, llegó distorsionada a la Asamblea de Madrid, en donde se tuvo la impresión de que se trataba de un atentado etarra.

El malentendido llegó al punto de que un portavoz de Izquierda Unida comenzó su intervención en la Comisión de Medio Ambiente de la Asamblea regional haciendo una condena del supuesto atentado terrorista.

El equívoco se produjo porqueEduardo San Román, director general de Protección Ciudadana, que acudía a la Comisión de Medio Ambiente, recibió una llamada que le informaba de una explosión que podía deberse a un atentado terrorista.

El malentendido fue finalmente aclarado y el presidente de la Comisión de Medio Ambiente, a las cinco y veinte de esta tarde, comunicó a los diputados presentes que la explosión no era consecuencia de una acción terrorista, de acuerdo con la versión facilitada por la Policía Municipal.