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Madrid incluirá el número de empadronados en cada vivienda para calcular la tasa de basuras

- La tasa la deberán abonar los propietarios de viviendas o locales

Madrid
SERVIMEDIA

El Ayuntamiento de Madrid presentó este jueves las ordenanzas fiscales para 2026, que incluirán una modificación de la tasa de residuos para incluir la variable del número de empadronados en la vivienda para el cálculo de la tarifa en los inmuebles de uso residencial.

Así lo avanzó la delegada del Área de Economía, Innovación y Hacienda del Ayuntamiento, Engracia Hidalgo, en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno. La incorporación del nuevo parámetro busca aportar mayor equidad y seguridad jurídica en su cálculo.

El aspecto del padrón, según el Ayuntamiento, ha resultado de una gran complejidad técnica ya que muy pocos ayuntamientos han sido capaces de incluirlo. Gracias a ello, se establecerán tarifas distribuidas en diez tramos (desde una persona empadronada a diez o más) en función del número de empadronados en el inmueble a 1 de enero de 2026.

Una nueva variable que se incorpora para calcular la cuota de la tasa es la diseñada mediante la suma de una tarifa básica, que pagan todos los inmuebles por la disponibilidad del servicio de recogida y tratamiento de residuos, y una tarifa por generación. Para el cálculo de la tarifa básica, se ha tenido en cuenta el dato del valor catastral individual de cada vivienda o local, mientras que para la de generación se ha tomado en consideración la cantidad de residuos generados y el porcentaje de calidad de la separación de cada uno de los 131 barrios de la ciudad, aportado por el Parque Tecnológico de Valdemingómez.

Por tanto, atendiendo a estos criterios, en Madrid, el recibo medio de la tasa de recogida para el año 2026 será de 142,6 euros, prácticamente la misma cuantía que en 2025, con algunas pequeñas variaciones en función del número de personas empadronadas en la vivienda.

Hidalgo criticó que la definición de la tasa es "un desastre" porque "no define los elementos esenciales de lo que hay que marcar como tributos" y defendió el trabajo "riguroso" de Madrid para elaborar la tasa.

Preguntada por cómo afectarán los cambios a casos como el de personas mayores que vivan solas en barrios donde se contamina más, replicó que precisamente por dichos casos se ha introducido el factor del padrón aunque "la parte fija no se puede tocar". En cualquier caso, de momento no es posible aclarar si con este cambio el Ayuntamiento recaudará más o menos que en el año anterior, porque para ello habrá que esperar a la presentación de los presupuestos.

1,7 MILLONES DE INMUEBLES

La ley promovida por el Gobierno central impone el importe que los ayuntamientos deben recaudar con esta tasa, que debe cubrir el coste de los servicios de recogida de residuos. El Ayuntamiento de Madrid no ha incluido dentro de estos gastos el coste de los servicios de limpieza de calles.

Por tanto, no se han imputado a la tasa más de 340 millones de euros por este servicio ni en 2025 ni en 2026, que, de haberse incluido, habrían duplicado prácticamente las cuotas que tendrían que pagar los madrileños. De este modo, el ingreso que se estima por esta nueva tasa se sitúa en torno a los 300 millones de euros.

El número de inmuebles que pagarán la tasa está en torno a 1,7 millones. Como ocurre en 2025, el próximo año no tendrán que hacer efectiva la tasa los garajes y trasteros asociados a una vivienda porque no generan residuos. Tampoco los solares ni los edificios en estado de ruina.

FAMILIAS NUMEROSAS Y GARAJES

Otra de las novedades incluidas en las ordenanzas es la referida a los garajes de uso industrial, destinados en su totalidad a uso residencial, a los que se les exime del pago de la tasa siempre que el interesado presente una declaración responsable que lo justifique.

Por otra parte, el Ayuntamiento de Madrid aplicará, además, la reducción en la cuota a las familias numerosas, similar a la que existe en el IBI, que tendrá en cuenta el valor catastral de la vivienda y la categoría del título de familia y mantendrá, para todos los perceptores del Ingreso Mínimo Vital y la Renta Mínima de Inserción, una reducción del 100% del pago de la cuota. Estas reducciones, que beneficiarán a más de 38.000 familias, suponen un ahorro de 4,71 millones de euros.

De la misma manera, las viviendas vacías y los locales donde no se desarrolle actividad alguna sólo pagarán la parte correspondiente a la tarifa básica por disponibilidad del servicio, pero deberán acreditar anualmente que se mantienen en esta situación. Para el control de las viviendas vacías, se contará con la información del padrón municipal.

Por otra parte, y siguiendo el principio de ‘quien contamina paga’, el sujeto pasivo de la tasa será quien realmente genere el residuo. Pero como es imposible conocer qué personas lo generan en cada vivienda o local, la tasa la deberá abonar el sustituto del contribuyente, que será el propietario de la vivienda o local, quien podrá repercutirla, en su caso, en el inquilino.

Además, en este segundo año de vigencia de la tasa, los contribuyentes podrán acogerse a la modalidad de Pago a la Carta, lo que puede suponerles una reducción en la cuota del 5%, con un límite de 15 euros en el ahorro.

(SERVIMEDIA)
23 Oct 2025
JAM/clc