El Consistorio inforó hoy que la renovación consistirá en cambiar los sensores de contaminación atmosféricos y se instalarán sensores de ruidos en estaciones en las que actualmente no existen.

Asimismo, se renovará todo el sistema informático de recogida de datos y envio de los mismo a la estación central. Además, se incluirá la medición de nuevos contaminantes como el benceno, xileno y tolueno.

Estas obras forman parte de la segunda fase de las cuatro que se realizarán en la futura Red de Vigilancia, Predicción e Iformación de la Contaminación en Madrid, que tienen un presupuesto total de 1.153 millones de pesetas, de los que el 80 por ciento se financiará con ayudas de la Unión Europea.