El objetivo de dicha propuesta es "frenar y erradicar los continuos asesinatos que se producen en las calles de Madrid", como el ocurrido recientemente, cuando un joven dominicano fue asesinado por defender a su hermana.

Iglesias afirmó que los madrileños ya no se sienten seguros porque "constantemente se producen asesinatos por armablanca o de fuego. Es especialmente preocupante cómo los fines de semana se están convirtiendo en sinónimos de violencia y muerte en lugar de ocio y tolerancia".

Explicó que el 1998 se abrieron 37 expedientes a tiendas por vender y exponer armas prohibidas y destacó que "no se ha producido el cierre de ninguno de estos establecimientos, a pesar de que las irregularidades continúan".

Iglesias mostró su preocupación por la posibilidad de que se incremente la autoprotección de cada ciudadano y pidióa las instituciones más atencion y medios para los cuerpos de seguridad del Estado, con el fin de evitar que en Madrid se instalen bandas de delincuencia organizada.