La Fundación ha activado un número Bizum para donaciones y números de cuenta en su web, pero también solicita ayuda humanitaria que saldrá pronto hacia las zonas damnificadas. Después del trabajo realizado por las unidades de emergencia especializada en derrumbes, como la UME y los bomberos de España, ahora hay que atender a los damnificados y reconstruir.

Debido al tipo de construcción en los dos países, sobre todo adobe, ya no cabe esperar sacar con vida a más personas de entre los escombros. Para atender a la población que ha sobrevivido, la Fundación pretende mandar camiones con el material humanitario necesario, así como un equipo sanitario de voluntarios.

Sin embargo, cabe señalar que continúa la dificultad el acceso a las zonas más afectadas en el atlas africano, todas ellas colapsadas y de difícil acceso por el movimiento de tierras tras el terremoto.

Las ONG que colaboran con la Fundación en dichos países trabajan desde el primer momento en las zonas más devastadas y piden que se lleven con urgencia tiendas de campaña, mantas, sacos de dormir, colchonetas y ropa de abrigo, así como material sanitario y medicinas.

Urge también material de higiene femenina y de alimentación infantil, como leche maternizada, leche de adulto y cereales, así como pañales. “Solicitamos la ayuda de todos los corazones generosos” para poder paliar el sufrimiento de los más débiles, los niños y las madres embarazadas de las catástrofes de Marruecos y de Libia, añadió la Fundación Madrina.