Según informó este martes la compañía, esta cifra supera el objetivo previsto para el pasado año, que se situaba en el 11%, y que fue posible gracias a la instalación de paneles fotovoltaicos, a la implantación de modelos híbridos de trabajo, a la optimización de espacios de trabajo, a la inversión en eficiencia energética y a la renovación de flotas de automóviles a motores ‘ECO’ y más eficientes, entre otras medidas.

La aseguradora destacó la instalación de un total de 8.930 paneles fotovoltaicos en las sedes de algunas de sus sedes en España, México, República Dominicana, Italia y Perú, que generaron un total de 3,51 GWh, es decir, un 9,3% menos en la factura eléctrica de estos edificios.

En España, la compañía utilizó energía procedente de fuentes 100% renovables lo que permitió reducir en un 36,7% la energía eléctrica adquirida de la red en su sede social respecto a 2019 gracias a los 4.700 paneles fotovoltaicos de “última generación” puestos en funcionamiento en 2022, que en 2023 generaron 1,62 GWh.

La aseguradora también apostó por el diseño y construcción de edificios con criterios de sostenibilidad y se fijó el objetivo de que en 2030 el 50% de la superficie de los edificios principales de oficinas en propiedad dispongan de un certificado de edificación sostenible ‘LEED’, ‘Beeam’ o ‘EnergyStar’.

A finales de 2023, el 46% de la superficie de estos inmuebles ya disponían de alguna de estas certificaciones (un 10% más que el pasado año), lo que permitió conseguir reducciones del 30% al 70% del uso energético, del 30% al 50% del consumo de agua, y aproximadamente un 35% de las emisiones de dióxido de carbono.

Actualmente, la compañía dispone de un total de 42 edificios con certificado ‘ISO 14001’ de Gestión Ambiental y 24 con cobertura ‘ISO 50001’ de Gestión Energética bajo un sistema integrado de gestión, que impulsa el uso eficiente de la energía, el agua y las materias primas.