Así se pronunció durante su intervención en la sexta reunión ministerial de la Alianza Internacional para la Seguridad (ISA, por sus siglas en inglés), en la que hizo referencia al "carácter trasnacional de las amenazas que enfrentan las sociedades actuales, desde el uso criminal de drones, el blanqueo de capitales, la ciberdelincuencia, hasta las amenazas híbridas y la radicalización", que en opinión del ministro, requieren del "intercambio de información operativa y la confianza mutua entre agencias como pilares fundamentales de la estrategia común contra el crimen organizado".

Creada en 2017, la Alianza Internacional para la Seguridad está formada por once países (España, Emiratos Árabes Unidos, Francia, Italia, Singapur, Bahréin, Senegal, Marruecos, Eslovaquia, Israel y Países Bajos), los cuales comparten el objetivo de impulsar y mejorar la cooperación en materia de seguridad, especialmente en la prevención y lucha contra el crimen organizado trasnacional, la radicalización y el terrorismo y la gestión y control de fronteras. En esta edición se oficializó la adhesión de Brasil, lo que abre la Alianza al continente americano.

“España se enorgullece de haber participado activamente en esta iniciativa desde el principio, convencida de que los desafíos globales requieren respuestas colectivas”, apuntó Marlaska, quien consideró que este organismo es una “plataforma eficaz” para fortalecer la cooperación internacional en seguridad.

Durante su viaje a Abu Dabi, Marlaska mantuvo sendos encuentros bilaterales con el viceprimer ministro y ministro del Interior de los Emiratos Árabes Unidos, Sheikh Saif bin Zayed Al Nahyan, a quien reconoció el “liderazgo” de su país en la consolidación de la Alianza, y con el ministro del Interior de Baréin, Rashid bin Abdullah Al Khalifa.

Previamente también se reunió con su homólogo senegalés, el ministro del Interior y de la Seguridad Pública, Mouhamadou Bamba Cissé, a quien agradeció “la eficacia preventiva, diaria y permanente” de las autoridades senegalesas para reducir la migración irregular, “tanto en sus fronteras como en sus costas”.