Crisis climática

Más de 250 revistas de salud piden a los líderes mundiales “justicia climática” para África

- En el mayor editorial simultáneo jamás publicado para el mismo llamamiento

MADRID
SERVIMEDIA

Más de 250 publicaciones sanitarias de todo el mundo se unieron este miércoles para publicar simultáneamente un editorial que insta a los líderes mundiales a ofrecer “justicia climática” para África.

Esa petición se produce antes de que el próximo noviembre se celebre la Cumbre del Clima, conocida como COP27, en Sharm el-Sheikh (Egipto).

El editorial, escrito por 16 editores de las principales revistas biomédicas de África (incluidas ‘African Health Sciences’, ‘African Journal of Primary Health Care & Family Medicine’ y ‘East African Medical Journal’) está publicado simultáneamente en 50 revistas africanas y otras publicaciones médicas internacionales importantes (como ‘The BMJ’, ‘The Lancet’, ‘New England Journal of Medicine’, ‘National Medical Journal of India’ y ‘Medical Journal of Australia’).

Nunca tantas revistas se habían unido para hacer el mismo llamamiento, lo que refleja la gravedad de la emergencia del cambio climático.

Los autores indican que África ha sufrido de manera desproporcionada, aunque ha hecho poco para causar la crisis, e insta a las naciones ricas a aumentar el apoyo al continente y a los países vulnerables para abordar los impactos pasados, presentes y futuros del cambio climático.

La crisis climática ha tenido un impacto en los determinantes ambientales y sociales de la salud en África, lo que ha tenido efectos devastadores para la salud, explican los autores.

En África occidental y central, por ejemplo, las graves inundaciones han causado muertes y migraciones forzadas por la pérdida de viviendas, tierras cultivadas y ganado, mientras que las condiciones meteorológicas extremas dañan el suministro de agua y alimentos, lo que incrementa la inseguridad alimentaria y la malnutrición, y provoca 1,7 millones de muertes al año en el continente.

Los cambios en la ecología de los vectores provocados por las inundaciones y los daños a la higiene ambiental también han causado un aumento de la malaria, el dengue, el virus del Ébola y otras enfermedades infecciosas en el África subsahariana.

En total, se calcula que la crisis climática ha destruido una quinta parte del Producto Interior Bruto (PIB) de los países más vulnerables a los impactos climáticos.

“PREOCUPACIÓN SUPREMA”

El daño a África debería ser “una preocupación suprema” para todas las naciones, según el editorial conjunto, dejar a los países en un mundo interconectado a merced de los impactos ambientales crea una inestabilidad que tiene graves consecuencias para todas las naciones.

Los autores argumentan que lograr el objetivo de financiación climática de 100.000 millones de dólares al año comprometidos por los países ricos para las naciones más vulnerables es ahora "crucial” con el fin de “prevenir los riesgos sistémicos de dejar a las sociedades en crisis", y apuntan que deben introducirse recursos adicionales para pérdidas y daños.

Reconocen que ya se han logrado algunos avances, incluidos sistemas de alerta temprana e infraestructuras para defenderse del clima extremo, señalan que las naciones que sufren los impactos en primera línea no son compensadas por las consecuencias de una crisis que no causaron.

Esto no solo es injusto, sino que también impulsa la espiral de desestabilización global, ya que las naciones invierten dinero en responder a los desastres, pero ya no pueden permitirse pagar una mayor resiliencia o reducir el problema de raíz mediante la reducción de emisiones, advierten.

“La crisis climática es producto de la inacción global y tiene un gran coste no solo para los países africanos afectados de manera desproporcionada, sino para todo el mundo”, indican, antes de añadir: “África está unida a otras regiones de primera línea para instar a las naciones ricas a que finalmente den un paso al frente, aunque solo sea porque las crisis en África más pronto que tarde se extenderán y abarcarán todos los rincones del mundo, momento en el cual puede ser demasiado tarde para responder con eficacia”.

Lukoye Atwoli, decano del ‘Medical College East Africa’, considera que “es hora de que la comunidad global reconozca que la crisis climática, aunque afecta de manera desproporcionada al continente, es una crisis global”. “La acción debe comenzar ahora y comenzar donde más duele, en África. La falta de acción hará que la crisis sea un problema de todos muy pronto”, advierte.

Bob Mash, editor de ‘African Journal of Primary Health Care and Family Medicine’ y presidente de la Academia Sudafricana de Médicos de Familia, subraya: “En África ya estamos viendo los efectos devastadores del cambio climático en la salud de las personas y la necesidad de fortalecer la comunidad. la atención primaria de salud orientada es ahora más que nunca”.

(SERVIMEDIA)
19 Oct 2022
MGR/gja