Los rumores sobre un posible adelanto electoral en Cataluña se han disparado a raiz del incipiente acuerdo entre ERC, IC, PP y PSC para impulsar un pacto local en la comunidad autónoma, que supondría la cesión de importantes parcelas de poder de la Generalitat hacia las corporaciones locales.

CiU se muestra contraria a este proceso de descentralización porque ve en él un intento de vaciar de competencas al Gobierno autónomo.

Artur Mas afirmó, antes de pronunciar una conferencia en el Club Siglo XXI de Madrid que el Gobierno catalán "tiene el propósito de no adelantar las elecciones".

Según explicó, los convergentes consideran que agotar las legislaturas es un "signo de normalidad" que "sólo tendría una excepción: que se produjera una agresión contra la autonomía de Cataluña a la que no pudiéramos hacer frente de ninguna manera más que con la disolución del Parlamento".

El delfín de JordiPujol reclamó la profundización del autogobierno de Cataluña, con una negociación en bloque de los traspasos pendientes por parte del Estado. Recalcó que Cataluña no puede esperar otros veinte años para culminar este proceso.

En su comparecencia, Mas estuvo arropado por varios dirigentes de Convergencia i Unió y por diputados en el Congreso de los Diputados pertenecientes a su formación política. Entre los asistentes como parte del público figuraba el vicepresidente del Gobierno central, Mariano Rajoy quien charló distendidamente con Mas antes de que éste pronunciase su conferencia.