El alcalde admitió esta mañana que “el ‘síndrome posaborto’ no es una categoría científica” y señaló que la intención del PP es informar sobre las "consecuencias" de esta intervención quirúrgica a las mujeres. “El Ayuntamiento de Madrid únicamente quiere poner a disposición de las mujeres información relativa a las eventuales consecuencias del aborto como intervención quirúrgica que es y, en segundo lugar, esa información no la van a dar Vox ni el PP”.

Para Rubiño, esto supone "recoger cable de manera bastante patética" con respecto a la posición inicial del PP, que apoyó la medida impulsada por Vox en el Pleno. A su juicio, esta iniciativa es "un insulto para las mujeres madrileñas y su libertad de ejercer un derecho como es la interrupción voluntaria del embarazo".

"Almeida ayer decía que se trataba solo de dar información a las mujeres y que quién podía estar en contra de eso. Hoy reconoce que, en lugar de información, de lo que se trataba era de obligar a las mujeres a recibir propaganda, propaganda por parte de los trabajadores del Ayuntamiento de Madrid basada en las mentiras anticientíficas que defiende su socio Vox", aseveró.

En la exposición de motivos del texto aprobado se alude a consecuencias como “consumo de alcohol y drogas”, “aumento de la probabilidad de muerte natural”, “esterilidad” y “tentativas de suicidio", algo que, señaló Rubiño, "no tiene nada que ver con la realidad porque "toda la literatura científica muestra cómo esto es absolutamente mentira". Lamentó que "lo que de verdad causa un enorme problema a las mujeres tanto a nivel de salud física como mental es no poder ejercer libremente sus derechos".

Concluyó diciendo que el PP está “cada vez más solo y está mostrando su faceta más ultra intentando competir con Vox” y poniendo "prejuicios moralistas y sectarios por delante de la defensa de todos los madrileños".

RETIRADA DE LA INICIATIVA

Reyes Maroto, como ya hizo ayer, miércoles, durante una entrevista para Servimedia, pidió al alcalde que "dé un paso al frente, sea valiente y retire de inmediato esta iniciativa en lugar de ampararla con el pretexto de que la información la elaborarán profesionales municipales". Maroto, además, anunció ayer que si no se retira exigirá la celebración de un Pleno extraordinario sobre esta cuestión para tratar de tumbar la medida.

"Las mujeres de Madrid no necesitan ser utilizadas en los juegos políticos de Vox ni recibir mensajes equivocados sobre su salud. Necesitan garantías de que las instituciones actúan con rigor científico y con respeto a su libertad", aseveró. Añadió que si no se corrige la decisión, las palabras de hoy no serán más que "retórica vacía destinada a tapar la cesión de su Gobierno a los postulados de la ultraderecha".