Sin embargo, en declaraciones a Radio Voz, indicó que "hay que reconocerle que desde que ha estado en el grupo ha sido una persona muy trabajadora, aunque manifestando su individualidad. A veces tenías l sensación de estar hablando con un juez más que con un parlamentario, pero eso es fruto de su propia realidad".

"Cuando una persona tiene mucha diferencia entre lo que opina la mayoría y lo que opina pesonalmente, entonces se tiene que cuestionar momentáneamente si debe estar ahí, pero hay un valor que es más importante que su propia opinión personal, que es la decisión democrática".

Respecto a los diputados independientes en el PSOE en general, Fernández subrayó que "creo que estaba mal enfocad el asunto de los independientes. Algunos ya lo dijimos en su momento. Los jueces, y sobre todo el primero que se fue (Garzón), aportaban -se nos dijo- una ética necesaria en nuestro partido, por eso el enfado de los viejos militantes fue tremendo. La ética la hemos aprendido siempre de nuestros mayores, no necesitábamos a nadie de fuera".

Fernández señaló que "en el seno del Partido Socialista se están viendo cosas que desde fuera no están siendo bien interpretadas. La designación de un renovador com Barrero para hacerse cargo como portavoz del grupo no se puede interpretar como una bofetada a los guerristas".

"Yo no me siento abofeteada, ni mucho menos. Lo más importante es que está apareciendo mucho debate y mucha pluralidad. Lo que tenemos que acostumbrarnos es a que esa pluralidad tenga todo tipo de manifestaciones y sean respetadas", agregó.

Por otro lado, la ex ministra dijo que el PSOE debería aumentar el diálogo con Izquierda Unida: "Reconozco que a mí misma me cuesta hablar con buen parte del grupo, con los máximos dirigentes del grupo, porque son personas poco tolerantes, poco transigentes y poco dialogadoras, pero desde luego, no pensando en el corto plazo, creo que hay que hacer muchísimos más esfuerzos de diálogo y de pacto con IU".