Ciencia

La mayor tormenta solar en la Tierra se produjo hace 14.300 años

- Según el análisis de anillos de árboles en los Alpes franceses

MADRID
SERVIMEDIA

La tormenta solar más grande nunca registrada en la Tierra se produjo hace unos 14.300 años, según se ha podido estimar gracias a un análisis realizado a anillos de árboles antiguos en los Alpes franceses.

Así lo explica un equipo internacional de científicos en un estudio publicado en la revista ‘Philosophical Transactions A: Mathematical, Physical and Engineering Sciences de la Royal Society’.

Los autores descubrieron un enorme aumento en los niveles de radiocarbono hace 14.300 años gracias a una tormenta solar masiva, la más grande jamás identificada. 

Una tormenta solar similar hoy sería catastrófica para la sociedad tecnológica moderna porque podría destruir los sistemas de telecomunicaciones y satélites, provocar apagones masivos de la red eléctrica y costar miles de millones de euros. 

Los científicos, pertenecientes a instituciones como el Collège de France, el Centro Europeo para la Investigación y Enseñanza de Geociencias Ambientales (Cerege, por sus siglas en francés), la Universidad de Aix-Marsella (Francia) y la Universidad de Leeds (Reino Unido), midieron los niveles de radiocarbono en árboles antiguos conservados en las orillas erosionadas del río Drouzet, cerca de Gap, en los Alpes del sur de Francia. 

TRONCOS

Los troncos de los árboles, que son subfósiles (restos cuyo proceso de fosilización no está completo) fueron cortados en pequeños anillos individuales. El análisis de estos anillos individuales identificó un aumento sin precedentes en los niveles de radiocarbono que ocurrió hace cerca de 14.300 años.

Al comparar este pico de radiocarbono con mediciones de berilio, un elemento químico que se encuentra en los núcleos de hielo de Groenlandia, el equipo propone que el pico fue causado por una tormenta solar masiva que habría expulsado enormes volúmenes de partículas energéticas a la atmósfera de la Tierra. 

“El radiocarbono se produce constantemente en la atmósfera superior a través de una cadena de reacciones iniciadas por los rayos cósmicos. Recientemente, los científicos han descubierto que los fenómenos solares extremos, incluidas las erupciones solares y las eyecciones de masa coronal, también pueden crear explosiones de corta duración de partículas energéticas que se conservan como enormes picos en la producción de radiocarbono que se producen en el transcurso de un solo año”, explica Edouard Bard, profesor de clima y evolución de los océanos en el Collège de Francia y el Cereger.

Los investigadores señalan que la aparición de tormentas solares masivas similares hoy en día podría ser catastrófica para la sociedad tecnológica moderna al eliminar potencialmente las telecomunicaciones, los sistemas satelitales y las redes eléctricas, y costar miles de millones de euros.

“Las tormentas solares extremas podrían tener enormes impactos en la Tierra. Estas súper tormentas podrían dañar permanentemente los transformadores de nuestras redes eléctricas, lo que provocaría apagones enormes y generalizados que durarían meses. También podrían provocar daños permanentes a los satélites, de los que todos dependemos para la navegación y las telecomunicaciones, dejándolos inutilizables. También crearían graves riesgos de radiación para los astronautas”, según Tim Heaton, profesor de estadística aplicada en la Universidad de Leeds.

OTRAS TORMENTAS SOLARES

Nueve de estas tormentas solares extremas (conocidas como eventos Miyake) ocurrieron en los últimos 15.000 años. Las más recientes confirmadas se produjeron en los años 993 y 774, que, sin embargo, fueron la mitad de intensas que la de hace unos 14.300 años.

“Las mediciones instrumentales directas de la actividad solar comenzaron en el siglo XVII con el recuento de manchas solares. Hoy en día, también obtenemos registros detallados utilizando observatorios terrestres, sondas espaciales y satélites. Sin embargo, todos estos registros instrumentales de corta duración son insuficientes para una comprensión completa del Sol. El radiocarbono medido en los anillos de los árboles, utilizado junto con el berilio en los núcleos de hielo polar, proporciona la mejor manera de comprender el comportamiento del Sol en el pasado", apunta Bard. 

La tormenta solar más grande observada directamente ocurrió en 1859 y se conoce como 'evento Carrington', ya que el astrónomo Richard Carrington fue el primero en observarla. Causó una perturbación masiva en la Tierra: destruyó las máquinas de telégrafo y creó una aurora nocturna tan brillante que los pájaros comenzaron a cantar creyendo que el Sol había comenzado a salir.

(SERVIMEDIA)
15 Oct 2023
MGR/clc/gja