MEDICOS SIN FRONTERAS DE FRANCIA, EXPULSADOS DE RUANDA
- Siguen trabajando en el país las delegaciones española, holandesa y belga
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
Los 24 miembros de la sección rancesa de Médicos Sin Fronteras, que han trabajado en Ruanda durante los últimos dos años, han sido expulsados del país sin explicación alguna, según informaron hoy a Servimedia fuentes de la sección española de la organización.
Las autoridades tutsis han bloqueado la cuenta bancaria que MSF Francia mantenía en el país, sus equipos y los 16 coches destinados por la organización a los programas de asistencia a la población han sido confiscados por el ejército.
La decisión de las autoridades tutsi afecta sólo a la delegación francesa, ya que otros sesenta voluntarios de las secciones belga, holandesa y española (que tiene 14 voluntarios) continúan su trabajo en la capital y varios campos de refugiados de las prefecturas de Kibungu y Cyangugu.
Médicos Sin Fronteras ha pedido explicaciones al Ministerio de Rehabilitación de Kigali, que firmó un acuerdo por varias ONGs el pasado verano para que pudieran trabajar en el país, y a varias autoridades ruandesas, que no han justificado la expulsión.
La ONG cree que la reacción de los dirigentes tutsis se debe a la denuncia que MSF hizo de las masacres en Kibeho en abril de 1995 y la publicación de un informe sobre las condiciones de los presos hutus.
La organización de ayuda médica ha señalado que "los actos de venganza privados, las ejecuciones extrajudiciales y la muerte en detención sustituyen a la justicia" en Ruanda.
(SERVIMEDIA)
03 Ene 1996
F