Así lo advirtieron durante su participación en el seminario ‘Adicciones y realidades jurídico-penales: Un abordaje desde la prisión hasta la sociedad civil’ que organiza la Red de Atención a las Adicciones (UNAD) en el Centro de Cultura Antiguo Instituto de Gijón, financiado por la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas y que fue concebido como espacio de intercambio de experiencias entre las más de 50 personas expertas que acuden, tanto desde la red de adicciones como desde otros organismos de atención.

En este contexto, la Red de Atención a las Adicciones lanzó una serie de propuestas a las administraciones públicas que pasan por "garantizar con urgencia" el derecho a la salud de las personas privadas de libertad con "más recursos personales, sanitarios y psicosociales" con el fin de "equiparar" la atención que reciben a la del resto de la sociedad y "primar" el régimen abierto y los cumplimientos extrapenitenciarios "por encima de los regímenes ordinario y cerrado".

Junto a ello, abogó por "cambiar la cultura penitenciaria hacia una cultura del diálogo y la no violencia" así como por "promover" la participación comunitaria e incorporar la perspectiva de género "a todos los ámbitos de este sistema".

A lo largo de la jornada se sucederán varias mesas que, con un enfoque "totalmente práctico", permitirán exponer distintas buenas prácticas realizadas desde la Unidad Terapéutica Educativa (UTE) del Centro Penitenciario de Villabona, las entidades de la red UNAD Asturias y los servicios de atención del Principado de Asturias.

ESTUDIO DE PRISIONES

La sesión alberga también la presentación de los principales datos de la última investigación de UNAD sobre la situación de las personas con adicciones en las prisiones españolas, un trabajo que incluyó una muestra de más de 1.000 personas privadas de libertad, de las que el 77% son hombres y el 23% son mujeres.

El estudio, financiado por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, se llevó a cabo en 18 centros penitenciarios gestionados por la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias del Ministerio del Interior (14) y por los Serveis Penitenciaris de la Generalitat de Cataluña (cuatro) y una de sus principales conclusiones fue que en las prisiones españolas están "sobrerrepresentados", tanto en el caso de los hombres como en el de las mujeres con adicciones, "los contextos de pobreza, las carencias educativas, la exclusión social, las violencias sufridas a lo largo de la vida -especialmente en las mujeres-, así como los problemas de salud mental".

Por lo que respecta al hombre participante en la muestra, tenía una edad media de 39 años, nacionalidad española y estudios primarios. Uno de cada nueve no cuenta con un recurso habitacional donde ir cuando salga de prisión y uno de cada cuatro tiene alguna enfermedad mental diagnosticada.

En cuanto a su entorno, procede de una familia numerosa y sus ascendientes presentan estudios inferiores a la primaria. Además, tienen hijos, aunque en la mitad de los casos no cuenta con la custodia.

Por su parte, la mujer participante tenía una edad media de 41 años, nacionalidad española y estudios primarios. Una de cada seis no cuenta con un recurso habitacional donde ir cuando salga de prisión. Una de cada tres tiene alguna enfermedad mental diagnosticada, un 12,3% tiene reconocida una discapacidad física y el 5% tiene certificada alguna discapacidad intelectual.

En cuanto a su entorno, procede de una familia numerosa y sus ascendientes presentan estudios inferiores a la primaria. En la mayoría de los casos cuenta con menores a su cargo y también tiene pareja, la cual se encuentra en prisión en el 71% de los casos.

Para UNAD, "un dato relevante" es que el 45% de las personas encuestadas manifestó haber sufrido alguna vez en su vida malos tratos físicos, cifra que aumenta en el caso de las mujeres hasta el 74,8%.

Por otro lado, el 53,8% de la muestra había sufrido malos tratos psicológicos (45,8% de los hombres y el 80,6% de las mujeres), mientras un 15,7% reconoció haber sido víctima de abusos o agresiones sexuales, dado que el 6,6% de los hombres y el 45,3% de las mujeres los han padecido en "alguno o varios momentos de su vida".

Por último, el seminario se completará con la celebración de un encuentro entre entidades de UNAD Asturias para el intercambio de experiencias.