“No nos quedemos en las cifras, que son importantes y significativas. Lo realmente son las personas y las realidades eclesiales que hay detrás de esa acción evangelizadora. No es un libro, no es un papel, es una fotografía de esa fe vivida, compartida y celebrada. Sin vanidad y sin acritud podemos decir que estamos orgullosos de nuestra fe”, remarcó el secretario general y portavoz de la CEE, César García Magán, durante la presentación en Madrid de la memoria.

Tras un “fuerte” aumento en el número de primeras comuniones en 2021 debido al covid, este año el número se sitúa en 171.494. La CEE también destacó que, 11.270 de los bautizados son mayores de 7 años.

El documento, de casi 100 páginas, también refleja la expansión de la labor social y asistencial de la Iglesia. En los últimos diez años los centros asistenciales de la Iglesia han aumentado en un 64,81%. Según los datos de 2022 hay 8.796 (3.459 más que en 2010). Un total de 3.778.740 fueron personas beneficiarias. En 2022, se destinaron 72.000.000 euros a la actividad asistencial por las diócesis, casi 17 millones más que en 2021.

Otro ejemplo es la presencia de la Iglesia en el ámbito de la salud: 829 capellanes; 18.921 voluntarios y agentes de pastoral; 982 personas dedicadas a la atención hospitalaria; 2.831 parroquias con grupo de pastoral de la salud; 64.875 personas acompañadas al mes en domicilios y 96.664 en hospitales; 158. 691 sacramentos en hospitales; 938.727 participantes en la eucaristía; y 283.068 comuniones a enfermos.

HORAS DE SACERDOTES

Asimismo, los 15.669 sacerdotes católicos dedicaron más de 27.430.000 horas en su labor en las parroquias. La actividad pastoral se intensificó especialmente en el ámbito rural, donde se ubican la mayoría de parroquias (11.421, de las 22.933). También, 10.147 misioneros y 463 familias anuncian la fe en los 1.122 territorios en misión por los cinco continentes.

A todo ello, la memoria añade que el Fondo “Nueva Evangelización” aumentó el número de proyectos financiados en 263 por valor de 2.576.950 euros (291.745 euros más que el año anterior); La actividad asistencial en las diócesis generó un valor anual de más de 580 millones de euros y los 2.536 centros católicos de enseñanza supusieron “un ahorro de 4.213 millones de euros al Estado”.

También, según el balance de la CEE, las diócesis españolas destinaron 47.244.310,75 a 499 proyectos de construcción, conservación y rehabilitación, 22 proyectos más que en 2021; que hay “millones de laicos”.

El documento también recoge datos externos a los que los obispos y la auditora PWC han dado importancia como que 8.048.484 según datos gubernamentales que fueron a misa regularmente, cifra que supone un leve descenso respecto al año anterior, pero García Magán matizó que “el número de personas que marca la equis es superior al número de quienes asisten regularmente a misa”.

NO ES UNA EMPRESA

“La iglesia no es una empresa ni un conglomerado. Es complicado calcular el empleo que generan las más de 40.000 entidades que hay en la Iglesia en España. Pero poco a poco vamos a ver cómo impacta en la economía del país”, avanzó también en la rueda de prensa la directora de la oficina de Transparencia, Ester Martín.

Martín subrayó que “es verdad que venimos de una época complicada del covid y que la propia pandemia ha impulsado esta búsqueda de respuestas y de acudir a parroquias, movimientos y también ha ocurrido entre los jóvenes”, argumentó, añadiendo que “la Iglesia continúa pegada a los problemas de la sociedad” con su labor de evangelización, cultural y ante problemas sociales como el envejecimiento, la despoblación y la salud.

“La Iglesia no pasa la factura a la sociedad por lo que hace. Casi cuatro millones de personas no podrían haber tenido algún tipo de sustento si no hubiera sido por la inmensa red de centros asistenciales que tiene abiertos la iglesia en nuestro país”, dijo la directora de la oficina, que insistió en que los datos “reflejan la religiosidad de nuestro país”.