Sus miembros fracturan los blindaes con un gran mazo de hierro ---------------------------------------------------------------

MADRID
SERVIMEDIA

Ricardo Ceballos Rumini, de 32 años, que fue detenido a finales del año pasado como presunto autor de siete atracos a bancos formando para de la denominada "Banda del Mazo", ha vuelto a ser arrestado el pasado fin de semana tras asaltar una agencia del Banco Central.

Junto a él han pasado a disposción judicial Angel Escobar Solórzano, de 30 años, y Concepción Párraga Juárez, de 27, supuestos coautor y encubridora del delito, respectivamente, según informó hoy la Jefatura Superior de Policía de Madrid.

La denominación de "Banda del Mazo" fue atribuida por la policía a tres conocidos delincuentes: Ricardo Ceballos Rumini, José Luis Ceballos Quiles y Francisco Galán Fernández, porque utilizaban, entre otras armas, un gran mazo de hierro con el que fracturaban los recintos blindados de las entidads bancarias que asaltaban, situadas todas ellas en la zona noreste de la capital.

Los tres integrantes del grupo fueron detenidos el pasado 21 de noviembre, aunque hace varios días la Sección Antiatracos de la Brigada de Policía Judicial dedujo, por distintas informaciones recogidas, que Ricardo Ceballos podría estar preparando alguna acción delictiva.

Empleados de una sucursal bancaria del distrito de Ventas, que ya había sido atracada por la "Banda del Mazo", le vieron merodear por las inmediacones de la entidad. Ocupaba un turismo que se detuvo durante algún tiempo frente al banco e iba acompañado de otro individuo desconocido.

DISPOSITIVO DE VIGILANCIA

Ante la sospecha de que el delincuente estuviera preparando un nuevo atraco, funcionarios del Grupo II y de la comisaría de Chamartín establecieron el pasado sábado un dispositivo de vigilancia a lo largo de la calle Arturo Soria y sus alrededores.

Ese día, sobre las doce del mediodía, la emisora policial comunicó un robo con intimidción perpetrado en una agencia del Banco Central situada en el número 8 de la calle Tribaldos.

Uno de los asaltantes iba armado con una pistola y actuó a cara descubierta, amenazando a los clientes en el patio de operaciones. Su compañero empuñaba un mazo de hierro con el mango de madera y llevaba cubierto el rostro con una media.

Antes de que fracturara el cristal blindado, los trabajadores le abrieron la puerta y, finalmente, los delincuentes se apoderaron de más de un millon y medio de pesetas para a continuación emprender la fuga en un coche.

Minutos después, la dotación de un coche policial vio cruzar la calle Arturo Soria, frente al número 251, a dos hombres con una bolsa. Uno de ellos era Ricardo Ceballos. Los funcionarios les siguieron discretamente hasta una finca de la calle González Amigo, en torno a la cual fue establecido un dispositivo de seguridad.

ENCAÑONO A LOS AGENTES

Según la policía, Ceballos vio a uno de los agentes y, aunque éstos le dieron el alto, él los encañon con una pistola y se introdujo escaleras arriba en un edificio próximo, perteneciente a la Embajada de Corea.

Poco después, salieron a la calle el matrimonio que tiene a su cargo el cuidado de la finca y un niño de corta edad. Explicaron que un desconocido les intimidó con una pistola para obligarles a salir de su vivienda.

El individuo, según el relato de los testigos, llevaba en una mano un grueso fajo de billetes que iba perdiendo, como posteriormente comprobaron los policías, ya que en la esalera y la puerta del inmueble estaban esparcidos bastantes billetes de 5.000 pesetas.

Los agentes registraron los edificios cercanos y el jardín, y localizaron al atracador dentro de un armario de cocina situado en una carbonera anexa a la casa.

Ceballos ofreció resistencia a su detención y tuvo que ser reducido por la fuerza. En el habitáculo fue hallada una pistola "Browning" del calibre 9 parabellum, cargada con 14 proyectiles.

Su compinche, Angel Escobar, estaba escondido entre una pilade ramajes en el jardín, con parte del dinero robado. Asimismo, entre unas maderas fue encontrado, dentro de una bolsa, el mazo de hierro.

Finalmente, en el ala opuesta del edificio, fue arrestada Concepción Párraga, compañera de Escobar, que había acudido al lugar previamente. El total del dinero recuperado supera el millón de pesetas.

Ricardo Ceballos tiene 10 antecedentes por robos con violación e intimidación, mientras que Angel Escobar tenía pendiente una reclamación judicial por quebrantaminto de condena, al no reintegrarse en prisión en marzo, después de disfrutar de un permiso.

(SERVIMEDIA)
02 Jun 1992
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