Además, Sánchez sostuvo que llevar la violencia machista “a la tribuna del Congreso” implica "cruzar una línea intolerable. Seguiremos adelante con convicción y determinación”, defendió el presidente en un Twitter tras la sesión parlamentaria en la que PP y, especialmente Vox, arremetieron contra Montero.

El ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, fue el primer ministro en mostrar este miércoles su “absoluta solidaridad” con Montero tras las “descalificaciones absolutamente insólitas” recibidas en el Congreso por parte de Vox.

Escrivá quiso trasladar su apoyo a su “compañera de Gobierno” en sus primeras palabras en la tribuna para defender la partida de los Presupuestos Generales del Estado destinadas a su departamento.

Por sus palabras, ya que fue el primero en verbalizar el apoyo a Montero, el ministro recibió los aplausos de parlamentarios presentes de las bancadas de la izquierda del hemiciclo. Después, cuando llegó el turno del Presupuesto de Universidades, el ministro Joan Subirats dijo seguir los pasos de Escrivá y, nada más subir a la tribuna, trasladó su apoyo a Montero por haber sido "víctima de un nivel de violencia política totalmente inaceptable en esta Cámara".

Escrivá aludió al momento vivido en el hemiciclo durante la defensa de la partida del Ministerio de Igualdad, cuando desde el PP y Vox se arremetió contra Montero por las consecuencias de la aplicación de la 'Ley del solo sí es sí'.

Mientras la diputada del PP, Margarita Prohens, dijo a la ministra que "hoy usted no debía estar en la bancada azul, es un insulto para las víctimas que siga sentada aquí tras lo que ha provocado”, la de Vox, Carla Toscano, la llamó "libertadora de violadores" y sostuvo que "su único mérito es haber estudiado en profundidad a Pablo Iglesias".

Estas palabras, y la advertencia de la Presidencia del Congreso de que esas palabras no constarían en acta, generaron que Montero pidiera que se incorporara al Diario de Sesiones la retahíla de insultos proferidos por la diputada de Vox, para que "conste la violencia política y quien la ejerce”. No obstante, el vicepresidente de la Cámara, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, retiró las palabras de la diputada de Vox.

Los apoyos a la ministra Montero llegaron también vía Twitter por parte de la titular de Hacienda y vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, quién calificó de “intolerables los ataques e insultos” recibidos por parte de la “derecha retrógrada y zafia”.

También de la ministra de Educación y portavoz del PSOE, Pilar Alegría, quien sostuvo que “somos muchas, muchas más” y alentó a “que el odio, el ruido y los insultos no nos despisten, nosotras a seguir construyendo un país mejor, más igualitario y más feminista”.

La titular de Política Territorial y portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, tachó de "una impúdica vergüenza" lo ocurrido y alertó de que "no" van "a tolerar la violencia política contra las mujeres".

Por su parte, el ministro de Consumo, Alberto Garzón, presente en la Cámara durante lo ocurrido, al término del debate sobre la partida de Igualdad subió a la tribuna para defender la partida de los Presupuestos Generales del Estado para su departamento.