Salud
La mitad de médicos jóvenes en España sufre burnout y es un 24% más frecuente en mujeres
- Según la OMC
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Más de la mitad de los médicos jóvenes de España presentan un cuadro completo de agotamiento emocional, despersonalización y baja realización personal, que son un 24% más frecuentes en mujeres, y casi el 94% tiene síntomas compatibles con desgaste profesional.
Así lo desvela el ‘Estudio Ikerburn: de la vocación al agotamiento’, presentado este miércoles por la Organización Médica Colegial (OMC) en el Senado y que incluye datos de más de 1.400 médicos jóvenes de todo el país, revela una prevalencia “crítica” del síndrome de burnout entre los médicos jóvenes españoles, tal y como precisó la organización en un comunicado.
En concreto, el 93,9% presenta síntomas compatibles con desgaste profesional y más del 50% cumple criterios de burnout completo según el MBI-HSS (Maslach Burnout Inventory–Human Services Survey).
El estudio alerta de que el agotamiento emocional y la falta de descanso “se están convirtiendo en la norma en una generación llamada a sostener el sistema sanitario”, según la OMC.
El informe presentado a raíz de los datos de ese estudio, elaborado por la Sección Nacional de Médicos Jóvenes y Promoción de Empleo de la OMC, muestra una “radiografía preocupante”, dado que confirma que el 79% de los médicos jóvenes sufre agotamiento emocional, el 84% presenta despersonalización y el 63% experimenta baja realización personal.
El estudio concluye que la realización de guardias de 24 horas durante la residencia es uno de los factores que más aumenta el riesgo de burnout, el 43,6% no libra tras las guardias en sábado y el 85% reconoce una disminución de la libido consecuencia del desgaste profesional.
Además, dos de cada tres padecen insomnio, el 38% recurre a ansiolíticos o alcohol y uno de cada cuatro ha necesitado una baja laboral por causas relacionadas con el burnout.
El problema afecta a todas las especialidades y comunidades autónomas, aunque se acentúa en las áreas quirúrgicas y hospitalarias y es un 24% más frecuente en mujeres.
La OMC advierte de que estos datos “no reflejan solo un problema individual, sino una crisis estructural que se inicia en el sistema de formación sanitaria especializada (FSE)”. “La falta de descansos, la sobrecarga asistencial y la precariedad contractual vulneran la normativa europea sobre tiempos de trabajo y repercuten directamente en la seguridad de los pacientes”, abundó.
A este respecto, el informe señala que “atender la salud mental de los médicos jóvenes no es un lujo, es una condición para garantizar la seguridad del paciente y la calidad asistencial”, al tiempo que pide una “reforma estructural urgente” para “frenar el deterioro del bienestar profesional y evitar la fuga de talento médico”.
El informe es fruto de un estudio que se ha desarrollado durante los últimos tres años y en el que se han implicado los colegios profesionales a través de sus secciones jóvenes y dicho estudio científico, que se encuentra en trámites de publicación en una revista de alto impacto, es la base que ha servido a esta vocalía para la realización de este informe sobre la situación actual de este colectivo.
Además de realizar una fotografía del estado de salud de los médicos jóvenes españoles, el informe presentado ofrece una serie de recomendaciones concretas con el objetivo de revertir la situación, entre las que se destacan cumplir la normativa laboral y garantizar los descansos tras guardias, reforzar la tutorización y la equidad en la carga asistencial, potenciar el Programa de Atención Integral al Médico Enfermo (PAIME), que solo conoce el 40% de los residentes, implementar programas de bienestar psicológico y conciliación, con especial atención a la brecha de género y crear un observatorio nacional de burnout para monitorizar la evolución del problema.
El estudio Ikerburn constituye la primera “radiografía integral” del desgaste profesional entre los médicos jóvenes en España y busca “romper el silencio en torno a la salud mental de los profesionales sanitarios”.
En este contexto, la OMC insistió en que el burnout “no puede asumirse como un peaje de la vocación médica” y reclamó situar el bienestar de los médicos en el centro de la política sanitaria y que el abordaje del burnout se considere una “prioridad” de política sanitaria y una inversión “estratégica” en capital humano, “imprescindible para asegurar la calidad y la continuidad de la atención médica en España”.
(SERVIMEDIA)
12 Nov 2025
MJR/gja


