Así se pronunció Montero en respuesta a una interpelación urgente de la diputada de Vox Macarena Olona en el Congreso de los Diputados sobre las medidas que va a adoptar su gabinete para garantizar la igualdad entre los españoles y a la que la ministra replicó que “una familia significa derechos sociales, poder pagar el alquiler, tener un ingreso mínimo vital, cuidar si quieres, pero no perder derechos si quieres cuidar, y poder trabajar y cobrar lo mismo que un hombre por realizar el mismo trabajo”.

Durante su intervención, la ministra quiso “reconocer” al movimiento feminista de España, cuyas organizaciones, dijo, “están salvando vidas”, así como a las “mujeres feministas que siempre han estado a la vanguardia en la conquista de derechos y de la profundización democrática”, convencida de que las “ideas reaccionarias” de la formación de Santiago Abascal “no pueden hacer feliz a nadie y solamente provocan el sufrimiento de millones de personas y rompen absolutamente la convivencia”.

“Incluso en los momentos más oscuros de la historia, cuando ustedes estaban sembrando el terror entre todas las poblaciones de Europa, siempre ha habido feministas, comunistas, socialistas, republicanas, demócratas que han mantenido la lucha por la democracia, por los derechos y la libertad y lo vamos a volver a hacer”, advirtió, para instar a los diputados de Vox a que “no duden de que la ley trans será ley y llegará a esta Cámara en este periodo de sesiones”.

Tras criticar que Vox no tiene “ni una sola propuesta para garantizar los derechos de las mujeres o de las familias en España”, Montero recordó a Olona que lo que las mujeres han conseguido “es gracias a la lucha de otras, de las que han venido antes". "De las que han conseguido que tengamos derecho a abrir una cuenta corriente, al aborto, al divorcio, al voto, a la participación política, a ser reconocidas como víctimas de violencia de género”, deslizó.

“Hay muchísimas mujeres que se esfuerzan mucho a diario y no consiguen lo que quieren, porque vivimos en una sociedad que es machista y que nos coloca en una posición de subordinación y que nos hace, por ser mujeres, sufrir más violencias, cobrar menos, tener menos derechos garantizados”, abundó, para reiterar que “lo que conseguimos no es gracias solo a nuestro esfuerzo”, sino “a la lucha colectiva”.

Con respecto a la familia, subrayó que, “para poder existir”, necesita de “un entramado social, político, institucional que garantice para todas las familias todos los derechos”, entre los que citó el Ingreso Mínimo Vital, el tope de los alquileres, la protección a las madres que son víctimas de violencia de género o la garantía de la “fortaleza de los servicios públicos”.

“Para que, si una mujer quiere cuidar, pueda cuidar sin perder derechos, pero que, si no quiere cuidar o quiere cuidar solo unas horas al día, pueda compatibilizar los cuidados con el trabajo y con el descanso y con ir al teatro y con ir al cine. O que, si quiere ir con una persona dependiente al cine y que haya un profesional que le ayude, pueda tener ese apoyo del Estado”, apostilló, para asegurar que “eso es cuidar a la familia”.

Montero concluyó su intervención haciendo suyas las palabras de la escritora uruguaya Cristina Peri Rossi, Premio Cervantes de este año, quien, en su poema 'Proyectos' y en referencia a la crianza de los hijos, asegura que no le gustaría que, “al llegar a la pubertad, un fascista de mierda le pegara un tiro”.

MENSAJE DE ESPERANZA

Durante la defensa de la iniciativa, Olona, candidata de la formación de Santiago Abascal a la presidencia de la Junta de Andalucía, quiso lanzar “un mensaje de esperanza a las mujeres de España”, convencida de que “el cambio empezará en Andalucía, gracias a la fuerza de las mujeres y los hombres de Andalucía”.

La diputada puntualizó que es y se siente “muy mujer” y lamentó que pertenece a una generación a la que le “inculcaron que el éxito profesional era la meta a la que debíamos aspirar, olvidando, relegando todo lo demás”, si bien se consideró “una mujer privilegiada”. “Por dos motivos, porque he alcanzado esa meta por méritos propios y porque, cuando comprobé que el feminismo me había estafado porque no me había contado que al final del camino que me había impuesto socialmente sólo había soledad, conseguí ganarle la batalla al reloj biológico y, como un milagro, fui madre a los 40 años”.

“Como presidenta de la Junta de Andalucía no pretendo imponer a ninguna mujer cuál debe ser su camino”, avanzó, para advertir de que, para ella, “no hay sueldo o puesto de responsabilidad más importante que un hijo”. A este respecto, señaló que, lo que Vox “defiende” y ella quiere “conseguir como presidenta de Andalucía”, es “que todas las mujeres podamos elegir y, para que las mujeres tengamos un auténtico derecho de elección, sólo Vox ofrece la solución, la misma que aplicará Santiago Abascal como presidente del Gobierno de España, la familia”.

“La familia debe ser el centro de todas las políticas públicas”, resolvió, consciente de que los jóvenes “no pueden permitirse formar una familia hasta que alcanzan una edad en la que el reloj biológico hace de la maternidad casi un imposible” y convencida de que, “como presidenta de Andalucía”, aspira a que las mujeres “no se vean obligadas socialmente a luchar contra su reloj biológico, incorporando la perspectiva de familia a todas las políticas públicas”.