Papa Francisco

La muerte de Francisco convierte a Roma en la capital del mundo

MADRID
SERVIMEDIA

Unos 50 jefes de Estado y de Gobierno, 10 casas reales, decenas de miles de fieles, de numerosos países y condición, también personas pobres y vulnerables a las que tanta atención prestó el papa Francisco coinciden este sábado en Roma para despedir al papa argentino, cuya muerte convierte al Vaticano y a la capital italiana en el epicentro del mundo.

La delegación española, una de las 130 que acudirán mañana 26 de abril al funeral del papa Francisco, está encabezada por los Reyes, las vicepresidentas María Jesús Montero, Yolanda Díaz, y el ministro de Presidencia Félix Bolaños.

Según informó la oficina de prensa de la Santa Sede, en la Misa Exequial, las autoridades se colocarán según el protocolo, ocupando la primera fila los mandatarios de Argentina, patria del Papa, e Italia. Después estarán reyes y demás presidentes por orden alfabético francés.

Además del esfuerzo del protocolo y de los servicios de emergencia para atender a las masas de gente, miles de agentes de seguridad de distintos países trabajarán para reducir al mínimo los incidentes.

Con el funeral se inician nueve días de luto en los que se celebrarán los novendiales, misas en sufragio por el difunto pontífice.

Tras la misa, que será presidida por el decano del colegio cardenalicio, Giovanni Battista Re, el cortejo fúnebre volverá al interior de la Basílica y después se le trasladará en un vehículo fuera de la Ciudad del Vaticano, por el centro de Roma hacia la basílica de Santa María la Mayor, donde el Papa decidió ser enterrado.

Según la organización, ese trayecto podría acercarse a una hora de duración. En el templo mariano, un grupo de personas vulnerables y pobres, los "preferidos" del Papa, recibirán el féretro en la escalinata de la entrada. El rito de inhumación será un acto privado que volverá a dirigir el cardenal camarlengo, Kevin Farrell.

(SERVIMEDIA)
25 Abr 2025
AHP/man