Así lo puso de manifiesto este miércoles la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), en su informe ‘Tendencias Globales de Desplazamiento Forzado’, la publicación anual más importante de esta entidad.

A finales de 2022, la cifra de desplazados en el mundo era de 108,4 millones de personas, un 19,1% más que en el ejercicio anterior. Según Acnur, esta tendencia al alza "no parece que vaya a disminuir en 2023", ya que el estallido del conflicto en Sudán ocasionó nuevos desplazamientos.

Del total de desplazados en el mundo, 35,3 millones son refugiados, es decir, personas que han cruzado una frontera internacional para llegar a un lugar seguro. Otros 62,5 millones – el 58% – se vieron forzados a desplazarse dentro de su propio país.

El informe indica que, a finales de 2022, había 4,4 millones de personas apátridas – o de nacionalidad indeterminada – en el mundo. Es decir, un 2% más en comparación con el cierre de 2021.

En el continente americano, continuaron los movimientos mixtos de personas refugiadas y migrantes en 2022 desde Venezuela hacia otros países de la región y desde Centroamérica hacia la frontera de México con Estados Unidos. Tres países de las Américas (Estados Unidos, Costa Rica y México) se encuentran entre los cinco principales receptores de nuevas solicitudes de asilo en el mundo.

CAUSAS

La guerra en Ucrania fue el principal desencadenante del desplazamiento en 2022: el número de personas refugiadas de ese país pasó de 27.300 hacia finales de 2021 a 5,7 millones al cierre del 2022. Según Acnur, "se trata del éxodo de refugiados de más rápido crecimiento desde la Segunda Guerra Mundial".

Se estima también que el número de refugiados afganos aumentó considerablemente a finales de 2022 con la actualización de las cifras de personas afganas acogidas por Irán, muchas de ellas llegadas al país en años anteriores. Por otra parte, el informe de este año refleja las actualizaciones al alza que hicieron Colombia y Perú del número de venezolanos en sus territorios, que en su mayoría se encuentran bajo la categoría “otras personas que necesitan protección internacional”.

En términos de capacidad de absorción económica y demográfica, los países de renta baja y renta media – es decir, aquellos con menos recursos – son de nuevo los que han dado acogida al mayor número de personas desplazadas. De hecho, 46 de los países menos desarrollados, que representan menos del 1,3% del producto interior bruto mundial, dieron acogida a más del 20% del total de los refugiados.

Según Acnur, la financiación de las múltiples situaciones de desplazamiento y el apoyo a los países de acogida se quedó muy por debajo de los requerimientos el año pasado, y "sigue igual en 2023".

Mientras, las necesidades se incrementan. Por eso, Acnur hizo un llamamiento a la comunidad internacional para poner en marcha acciones conjuntas con las que hacer frente a "estas cifras récord de desplazamiento".