El Museo de América arrancará el nuevo curso con una serie de intervenciones curatoriales que convivirán temporalmente con su exposición permanente. En las mismas se ofrecerá “un prisma diferente, decolonial y no eurocéntrico” con el objetivo de “interpelar al visitante, generando a su vez preguntas y creando perspectivas que enriquezcan el discurso de la permanente, haciéndole más plural, dinámico y multilineal”.