La compañía ya adelantó que dentro de esta actualización elevará un 16,6% el suelo de su dividendo para los ejercicios 2023, 2024 y 2025 quedando fijado en 1,40 euros por acción, frente a los 1,20 anteriores. En este contexto, anunció este lunes que abonará el próximo 7 de agosto un dividendo a cuenta de los resultados de 2023 de 0,50 euros por acción.

Dicho anuncio de subida del dividendo llegó después de que Naturgy descartara la contratación de Ignacio Gutiérrez-Orrantia como consejero delegado y acompañado de un mensaje de confianza del consejo de administración en el proyecto industrial de la compañía y en el equipo directivo.

A este respecto, Naturgy destacó que la actualización llega después de superar en 2022 todos los objetivos comprometidos en su Plan Estratégico 18-22. Así, prevé alcanzar 5.100 millones de beneficio bruto de explotación (Ebitda) (300 millones más que la previsión anterior) y unas inversiones de 13.200 millones, superando en 5.000 millones las inversiones del anterior periodo estratégico.

E concreto, al cierre de 2022, la compañía registró mejores resultados operativos con un Ebitda de 5.000 millones (frente a los 4.600 previstos en julio de 2018), redujo la deuda neta hasta los 12.100 millones (frente a los 15.100 millones comprometidos) y mejoró sus inversiones hasta los 8.100 millones (frente a los 7.300 millones iniciales).

Según la compañía, Las nuevas previsiones responden “a una estrategia clara alineada con la transición energética, una gestión basada en la eficiencia, un fuerte compromiso con sus clientes y la sociedad, así como a una apuesta por el crecimiento orgánico y siempre manteniendo la disciplina financiera de inversión”.

Del total de inversiones previstas entre 2023 y 2025, el 61% se destinará al desarrollo de renovables y el 28% al negocio de redes. La compañía estima también cerrar el 2025 con una deuda neta de 16.000 millones, 1.000 millones menos que la previsión anterior.

“Esta mejora de nuestras previsiones hasta 2025 responde a una estrategia alineada con la transición energética y poniendo foco principalmente en el crecimiento orgánico que, junto con una gestión oportunista de la rotación de activos, seguirá contribuyendo a nuestra transformación”, explicó Reynés, quien destacó que “nuestra visión estratégica permanece basada en avanzar hacia la descarbonización, invirtiendo con una estricta disciplina financiera, y sin descuidar nuestro sólido compromiso con nuestros clientes, accionistas, empleados y la sociedad”.

En cuanto al dividendo, el consejo lo vincula al mantenimiento de un rating crediticio de BBB por S&P. Además, el nuevo suelo de 1,40 euros es consistente con el payout promedio del 85% anunciado en julio de 2021.

En base a los precios actuales de la acción, según los cálculos de Naturgy, este nuevo suelo supone una rentabilidad del 5,4%, que compensa a los accionistas la subida de los costes por tipos de interés e inflación.