Según informó FINE este martes, la apertura de la negociación se produce a petición de FINE junto a CCOO y UGT. “Los tres sindicatos creemos muy importante iniciar con antelación la negociación del convenio y apostamos por un proceso corto en el tiempo, que equilibre con urgencia el contraste entre beneficios récord del sector y pérdida de poder adquisitivo de sus plantillas”, agregó FINE.

Repasó las peticiones sindicales de un incremento salarial que oscile entre el 17% y el 23% en tres años con carácter universal y sin compensación, absorción o mecanismos similares. Para 2023 piden un incremento en tablas del 4% con efectos del 1 de octubre de este año y medidas adicionales de compensación de la pérdida de poder adquisitivo. Para 2024 reclaman una subida del 5% más un 1% en función del IPC y un 1% según los beneficios del sector y tanto para 2025 como para 2026 piden una subida del 4% más el 2% adicional por IPC y beneficios.

A ello se suman garantías de aplicación a toda la plantilla de los incrementos pactados y abonos no recurrentes, sin compensación ni absorción.

Los tres sindicatos también quieren topar al 1% los tipos de interés hasta el 1 de octubre de 2024, plazo que sería ampliable, y con compromiso de negociación en cada empresa de una mejora de ese tope o la suscripción de acuerdos con la Agencia Tributaria sobre retribuciones en especie.

Respecto a la presión comercial que denuncian los sindicatos, piden medidas para paliar las cargas de trabajo, los riesgos psicosociales, la consideración de enfermedades psicológicas como profesionales y mayor dotación de plantilla.

Además de estas peticiones, FINE informó de que trabajarán en propuestas sobre la carrera profesional, el empleo, la salud laboral, la igualdad y los derechos digitales, entre otros aspectos.