Beber agua mineral, a pesar de que el ayuntamiento ha procedido a la hipercloración del agua, es la primera mdida de previsión que han tomado los vecinos de la zona norte de Alcalá para ponerse a salvo del brote de neumonía.

Sin embargo, los más aprensivos no se fían y, a la vista de las continuas informaciones que difieren sobre el canal por el que supuestamente se transmite la bacteria, han decidido abandonar sus domicilios y trasladarse a casas de amigos o familiares que viven en otras zonas de la ciudad, donde hasta el momento no se ha registrado ningún caso de neumonía.

"Las autoridades dicen que e brote va a remitir, pero a medida que transcurren los días siguen apareciendo nuevos casos de 'legionella' y la bacteria sigue matando a gente. No me fío, no me fío", señaló a Servimedia un alcalaíno.

La psicosis se extiende por todo Alcalá de Henares, y los vecinos temen que el brote localizado en una zona se convierta en una epidemia que afecte a otros lugares de la ciudad, a pesar de los mensajes de las autoridades sanitarias que confían en que el brote remita de inmediato.