Desde Albacete, en un mitin junto al líder nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, que congregó a unas 1.000 personas según las cifras de la organización, Núñez se disculpó con las otras “cientos” que no pudieron entrar pero sí saludaron a la entrada. A todos ellos les pidió el apoyo para que Castilla-La Mancha no se gobierne “como si fuera un corralito”.

Para “salir de la resignación y la desidia” ofreció su proyecto, después de lamentar que Castilla-la Mancha “vive con vergüenza esta campaña electoral” por los comentarios o actitudes de Page durante la campaña. “Hemos sentido vergüenza del presidente” y “sé que todos coincidimos en que hoy Page no está en condiciones de seguir siendo presidente”, sentenció.

Tras hacer este análisis, se ofreció como el presidente “sereno, tranquilo, centrado, ilusionado y comprometido” que “merece” Castilla-La Mancha, y llamó al “voto útil, práctico, honesto, de la calle, cercano, empático”. Así las cosas, pidió a sus conciudadanos “sumarse a este momento histórico”.

“Ha llegado el momento de que culminemos el fin de una era, la del socialismo”, recalcó Núñez, llamando a votar con “libertad” por “un cambio histórico” confiando en “un proyecto sensato” que va a gestionar “con rigor, seriedad y eficacia”. “Yo no pido el voto ni para mí ni para mi partido, pido el voto para el futuro de Castilla-La Mancha y España”, explicitó.

En su caso, el candidato a la Alcaldía de Albacete, Manuel Serrano, definió al PP como “la gran casa del centro político y de la derecha española”. Al igual que Núñez, pidió “un voto a la libertad” y avisó de que cualquier otra opción se traduce en “oportunidades para la izquierda”.

“Sabiendo lo que sabemos del PSOE, lo que han hecho en Tenerife, en Melilla, en algunos municipios de Andalucía y en Murcia, aquí puede venir en estas horas algún cartero repartiendo correspondencia a alguna casa”, alertó ante los escándalos de presunta compra de votos de las últimas horas.

“Nuestra papeleta viene así, sola”, y “cargada de personas decentes, honradas, que se van a dejar la piel en Albacete, en Castilla-La Mancha y en España, que está también al alcance de la mano”, proclamó el candidato a la Alcaldía.