Salud

La OMS lanza una guía sobre supresión viral del VIH y pide a los países que amplíen el uso de las pruebas rápidas

- En la 12ª Conferencia Internacional de la Sociedad Internacional del SIDA sobre la Ciencia del VIH

- Subraya que las personas con VIH tuvieron 142 veces más riesgo de morir por ómicron

- Recuerda que la enfermedad avanzada “aumenta el riesgo de muerte" por viruela del mono

MADRID
SERVIMEDIA

La Organización Mundial de la Salud (OMS) publica este domingo nuevas orientaciones científicas y normativas sobre el VIH en el marco de la 12ª Conferencia Internacional de la Sociedad Internacional del SIDA (IAS) sobre la Ciencia del VIH, que se celebra en Brisbane (Australia) del 23 al 26 de julio. En ella también analizará la situación de las personas con VIH que contrajeron viruela del mono, que tienen más riesgo de muerte, o covid-19, que tuvieron 142 veces más riesgo de morir con la variante ómicron que aquellas sin VIH.

Así lo precisó la OMS en un comunicado en el que añadió que sus nuevas directrices y una revisión sistemática adjunta de ‘The Lancet’ publicadas este domingo describen el “papel” de la supresión viral del VIH y los niveles indetectables de virus “tanto en la mejora de la salud individual como en la detención de la transmisión del VIH”.

En concreto, la guía describe los “umbrales clave” de carga viral del VIH y los enfoques para medir los niveles de virus contra estos umbrales y recuerda que las personas que viven con el VIH que alcanzan un nivel indetectable de virus mediante el uso “constante” de la terapia antirretroviral “no transmiten el VIH a sus parejas sexuales y tienen un bajo riesgo de transmitir el VIH verticalmente a sus hijos”.

“La evidencia también indica que existe un riesgo insignificante, o casi nulo, de transmitir el VIH cuando una persona tiene una medición de la carga viral del VIH de menos o igual a 1.000 copias por mililitro, también conocida comúnmente como tener una carga viral suprimida”, espetó la OMS, convencida de que la terapia antirretroviral “sigue transformando la vida de las personas que viven con el VIH”.

A este respecto, su director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus, subrayó que las nuevas directrices publicadas este domingo por esta agencia de la ONU “ayudarán a los países a utilizar herramientas poderosas que tienen el potencial de transformar las vidas de millones de personas que viven con el VIH o corren el riesgo de contraerlo".

A finales de 2022, un total de 29,8 millones de los 39 millones de personas que viven con el VIH estaban tomando tratamiento antirretroviral (76%) y casi tres cuartas partes de ellas (71%) vivían con el VIH suprimido, por lo que su salud “está bien protegida y no corren el riesgo de transmitir el VIH a otras personas”, según la OMS, que lamentó que la supresión de la carga viral en los niños que viven con el VIH “es solo del 46%”, una “realidad” que, a su juicio, “requiere atención urgente”.

OTRAS ACTUALIZACIONES CIENTÍFICAS

Por lo que se refiere a otras “actualizaciones científicas y normativas clave” que publicará la OMS en el marco de la conferencia IAS 2023, la agencia recordó que, según un análisis de los datos de vigilancia mundial que le fueron notificados durante el brote de viruela del mono, alrededor de 32.000 de los más de 82.000 casos tenían información sobre el estado serológico. De ellos, el 52% vivía con el VIH, la mayoría eran hombres que tienen relaciones sexuales con hombres y más del 80% informó de que el sexo era “la ruta más probable de infectarse”.

Entre las 16.000 personas diagnosticadas con viruela del mono y que viven con el VIH, alrededor de una cuarta parte (25%) tenía enfermedad “avanzada” por VIH o inmunosupresión, lo que, según la OMS, “aumenta el riesgo de hospitalización y muerte”.

“Las personas que viven con el VIH que estaban tomando tratamiento contra él y con buena inmunidad tuvieron resultados de hospitalización y muerte similares a los de los que eran VIH negativos”, sentenció la agencia, que recomienda a los países que “integren la detección, prevención y atención” a la viruela del mono con los programas “existentes e innovadores de prevención y control del VIH y las infecciones de transmisión sexual”.

Para “comprender cómo prepararse mejor y responder a futuros aumentos en la transmisión” de viruela del mono, la OMS realizó una encuesta electrónica rápida en mayo que se centró en los hombres que tienen sexo con hombres y las personas trans y de género diverso con el fin de evaluar las experiencias comunitarias del brote en Europa y las Américas, en la que participaron casi 17.000 personas.

Del total, casi el 51% manifestó haber “cambiado” su comportamiento sexual a raíz del brote, con medidas como la reducción del número de parejas sexuales, y el 35% había mantenido estos cambios un año después. Unos hallazgos que, para la OMS, “enfatizan la importancia de aumentar el acceso a la vacunación y el diagnóstico a nivel mundial”.

COVID-19

En paralelo, la OMS puntualizó que un análisis actualizado de su plataforma clínica mundial para covid-19 hasta mayo de 2023 reveló un “alto riesgo persistente” de muerte en personas que viven con el VIH hospitalizadas por covid-19 afectadas por las variantes pre-Delta, Delta y Omicron, con una tasa general de mortalidad hospitalaria del 20% al 24%.

Para las personas sin VIH, el riesgo de muerte disminuyó con la variante de Omicron en un 53%-55% en comparación con las variantes pre-Delta y Delta; pero para las personas que viven con el VIH, la disminución porcentual de la mortalidad durante el período de la ola de Omicron en comparación con las otras olas fue “modesta” (16%-19%) y, según la OMS, “esta diferencia dio lugar a un aumento de 142 veces el riesgo de muerte entre las personas con VIH en comparación con las personas sin VIH durante este periodo”.

En este sentido, la directora de los Programas Mundiales de VIH, Hepatitis e Infecciones de Transmisión Sexual de la OMS, Meg Doherty, advirtió de que el VIH no controlado “sigue siendo un factor de riesgo de malos resultados y muerte en el brote de viruela del mono y la pandemia de covid-19”, convencida de la necesidad de “garantizar la integración de las consideraciones relativas al VIH en la preparación y respuesta ante una pandemia”.

“Proteger a las personas que viven con el VIH de futuras pandemias es vital y refuerza la necesidad de garantizar el acceso a las pruebas y el tratamiento del VIH y a las vacunas preventivas para viruela del mono y covid-19 para salvar vidas”, abundó, consciente de que “las respuestas lideradas por la comunidad que funcionan para el VIH también serán beneficiosas para abordar futuras pandemias".

MEJORA DE LAS PRUEBAS DE VIH

Con las nuevas recomendaciones sobre las pruebas del VIH, la OMS pide a los países que “amplíen” el uso de la autoprueba del VIH y “promuevan las pruebas a través de las redes sexuales y sociales” con el reto de “aumentar” su cobertura y “fortalecer la aceptación de los servicios de prevención y tratamiento del VIH en entornos de alta carga y en las regiones con las mayores brechas en la cobertura de las pruebas”.

En este contexto, defendió que el nuevo marco de políticas sobre atención primaria de salud y VIH “ayudará a los responsables de la toma de decisiones a optimizar el trabajo y la colaboración para avanzar en la atención primaria de salud y las respuestas específicas de la enfermedad, incluido el VIH”.

“En el segundo año de implementación, las Estrategias mundiales del sector de la salud sobre el VIH, las hepatitis virales y las infecciones de transmisión sexual para 2022-2030 abogan activamente por sinergias en el marco de la cobertura universal de salud y la atención primaria de salud”, espetó la OMS, cuyo subdirector general de Cobertura Universal de Salud, Enfermedades Transmisibles y No Transmisibles, Jérôme Salomon, defendió que “poner fin al SIDA es imposible sin optimizar las oportunidades en todos los sistemas de salud y dentro de ellos, incluidas las comunidades y en el contexto de la atención primaria de salud”.

Estas últimas investigaciones y orientaciones se presentan en un momento en que, según la ONU, el “progreso” hacia la erradicación de la “epidemia mundial de SIDA” se ha “retrasado”, tras la pandemia, si bien reconoció que países como Australia, Botswana, Ruanda, la República Unida de Tanzania y Zimbabwe están “trazando un camino para poner fin al SIDA” y otros 16 “están cerca de alcanzar los objetivos mundiales” de lograr que el 95% de las personas con VIH conozcan su estado, el 95% de los diagnosticados reciban terapia antirretroviral y el 95% de los que están en tratamiento tengan cargas virales suprimidas.

(SERVIMEDIA)
23 Jul 2023
MJR/clc