La filial española de Orange consiguió un beneficio operativo (Ebitdaal) de 1.246 millones de euros, un 12,1% por encima de los 1.111 millones contabilizados en 2022. La teleco creció en España un 1,8% en facturación de servicio (primera subida interanual desde 2018), hasta los 3.192 millones. Los ingresos por paquetes convergentes escalaron un 1,3% (con un resultado de 3.192 millones), los de solo móvil bajaron un 0,9% (782 millones) y los de fijo un 5% (457 millones). Por su parte, las ventas de equipo repuntaron un 12,5% y se situaron en 711 millones, en tanto que los ingresos mayoristas menguaron un 9,6% y se quedaron en 793 millones.

La tendencia comercial de Orange España se refleja también en el crecimiento de su cartera total de clientes, que supera los 21,65 millones de clientes a 31 de diciembre, un 3,5% interanual más, con 17,71 millones de usuarios de servicios móviles (+4,5%) y 3,93 millones de banda ancha fija (-1,1%). En fibra óptica suma 37.000 accesos y llega a 3,6 millones.

En cuanto a televisión, la plataforma de Orange cuenta con 1.313.000 abonados, un 8,6% más que en 2022. La penetración de la televisión sobre la base total de clientes de banda ancha de la compañía supera ya el 33%.

"FUERTE" SUBIDA

La matriz de la compañía destacó en un comunicado que su división española retornó al crecimiento interanual minorista por primera vez desde 2018, con una "fuerte" subida del beneficio operativo.

El conjunto del grupo Orange aumentó sus ingresos un 1,8% (hasta los 44.122 millones de euros) y el Ebitdaal un 1,3% (13.035 millones), y da por logrados "todos los objetivos financieros" marcados para el ejercicio 2023, según señaló en un comunicado la CEO de la compañía, Christel Heydemann, que confió en que la fusión con MásMóvil en España reciba la aprobación definitiva de Bruselas este próximo 22 de febrero.